Quiénes se forrarían con el pelotazo chino de la venta del Sevilla

Una oferta abrumadora por el Sevilla

En el Pizjuán se están viviendo momentos de extrema tensión. La eliminación en la Champions League ha quedado en un segundo plano después de que El Confidencial se hiciera eco de la abrumadora oferta que han recibido los accionistas del Sevilla para vender el club. Las primeras informaciones apuntaban a que la oferta era de unos 1.500 euros por cada una de las 103.467 acciones que conforman el paquete, lo que valoraría a la entidad sevillana en unos 155 millones de euros, pero posteriormente que la cantidad ofrecida es incluso mayor.

El grupo inversor, que por ahora se ha mantenido en el anonimato, proviene de China y, según ha podido saber El Confidencial, el primer acercamiento para la compra del club se produjo hace seis meses a través de la multinacional KPMG. Se estudió entonces, ya que miembros del consejo de administración del Sevilla veían con buenos ojos la operación, pero se vio frenada por otro de los grupos a los que pertenece el club. Ahora, uno de los bandos ha querido dejar en evidencia al otro y ha permitido que esta negociación sea de dominio público, con la presión social que ello conlleva.

La situación no está cerca de resolverse ni para un lado ni para otro. La repartición del total de las acciones es tan amplia que resulta realmente difícil poder poner a todos los implicados de acuerdo. En este artículo intentamos dar luz y poner nombre sobre quién es quién entre los dueños del Sevilla Fútbol Club.

1. José María del Nido y familia

El expresidente del Sevilla no tiene, direcamente al menos, ninguna representación en el consejo de administración. Desde que fue condenado a siete años de cárcel en diciembre de 2013 por corrupción por el 'Caso Minutas', Del Nido cedió su paquete accionarial a su hijo mayor, también llamado José María, y abandonó sus puestos de responsabilidad en el club. Pero no ha perdido su influencia. Su hijo José María, además de tener el 27% de las acciones, es vicepresidente del club, mientras que sus otros dos vástagos, Miguel Ángel y Adrián, también tienen puestos en el Sevilla.

Del Nido empezó a adquirir acciones hace ya 25 años, cuando por entonces cada acción tenía un valor de 60 euros. Fue poco a poco adquiriendo mayor volumen hasta el 27% actual que maneja su familia. Por esa cantidad que les pertenece, si por cada acción se pagarían 1.500 euros, les correspondería un total de casi 42 millones de euros... pero no tienen intención de vender.

2. José Castro

Pepe Castro lleva en el consejo de administración del Sevilla desde 1997. 20 años en los que ha visto al club en Segunda y cinco veces campeón de la Copa de la UEFA. Siempre se mantuvo a la sombra de José María del Nido cuando el anterior presidente estuvo aquellos once años en el cargo, y desde que asumió la presidencia tras su dimisión ha sido menos polémico que su antecesor. La oferta por la compra del Sevilla le atrae. Su 5% de sus acciones le haría embolsarse algo más de 7 millones de euros, aunque se habla de que podría llegar a los 10 millones.

Castro forma parte del grupo 'Sevillistas en acción' junto a su cuñado, Francisco Guijarro, y el expresidente del club, Roberto Alés. A través de Guijarro, Castro tendría control de otro 5%, lo cual le da mayor poder de decisión en este posible proceso de venta.

3. Roberto Alés

Alés fue la persona que le cedió el cargo a Del Nido en mayo de 2002. Pese a su poco tiempo al frente de la entidad a principios de siglo, se le recuerda con muchísimo cariño en el club, ya que fue el encargado de enderezar el rumbo sevillista desde la Segunda División hacia el camino que posteriormente continuó Del Nido. Fue él quien propulsó la idea del traslado del Sevilla a La Cartuja, lo cual finalmente no se produjo.

Octogenario, es el miembro accionista más veterano y se caracteriza por ser muy pragmático en sus decisiones. A su edad, una oferta tan jugosa como la que plantea el fondo chino es un regalo. Sacaría muchísimo partido a su 5% de acciones, pero su postura no está clara.

4. Rafael Carrión

Otro expresidente de la sociedad hispalense. Estuvo al frente del Sevilla de 1997 a 2000 en una de las épocas más negras deportivamente hablando de la historia del club, don dos pasos por Segunda. Sin embargo, Carrión nunca se ha desligado del Sevilla, ya que mantiene su 15% del paquete accionarial, lo cual lo convierte en el segundo máximo accionista tras el hijo de José María del Nido. Tiene una buena fortuna gracias a que es dueño de una financiera, Financa, que tiene sede en una de las zonas más lujosas de la capital andaluza. Además, posee varias viviendas en el centro de Madrid. Su postura sobre la venta o no del club no está clara, ya que no tiene necesidades económicas que le hagan plantearse seriamente la idea de abandonar a un club que considera suyo, pese a que hace más de un cuarto de siglo que dejó de ser presidente.

5. José Gómez Miñán

Miñán es otro de los pesos pesados de los accionistas del Sevilla. Formaba parte, en su momento, del llamado 'Grupo de Utrera'. En él se encontraban hombres fuertes como Pepe Castro y Francisco Guijarro. Sin embargo, este triunvirato utrerano se rompió cuando Baena se enemistó con Guijarro y se pasó al bando de Del Nido, al que ha apoyado. Suele estar en contra de las decisiones de Guijarro y los utreranos. Tiene una solvencia económica muy cómoda, aunque un montante del peso de la oferta china podría hacer que se plantease la venta de su 3,5% de acciones, ya que con ello se embolsaría algo más de cinco millones de euros. Es decir, esta posible transacción pondría en duda su alianza con Del Nido.

6. Pequeños accionistas

De conformarse como un único grupo, este sería el grupo mayoritario de accionistas. Pero como no puede ser de otra manera en este club, está extremadamente repartido. Hay tres grupos principales y en total, los pequeños accionistas se reparten el 40% restante de las acciones del Sevilla. Es decir, tienen mucho peso específico, que no siempre se materializa. De hecho, han promovido una reunión de todos los pequeños accionistas para unir sus voces y clamar a los poderosos para que, primero, les aclaren si esta oferta (sobre la cual nadie se atreve a decir nada) es real, y que les tengan en cuenta para la toma de decisiones y que, por otra parte, tengan derecho a oponerse si así lo deciden.

El principal miedo de este gran grupo es que suceda en el Sevilla como en otros clubes de Primera División, como el Málaga o el Valencia, donde llegó un gran grupo inversor extranjero y acabe todo siendo una burbuja que se pincha, afectando a la viabilidad futura del equipo.