La confesión de Zidane a Morata y Lucas: "Tengo que alinear siempre a la BBC"

En el regreso del Real Madrid a la Copa del Rey se volvió a poner de manifiesto que los canteranos piden a gritos más oportunidades en el primer equipo. La goleada frente a la Cultural Leonesa, aunque se tratara de un rival de Segunda B, fue una muestra más de la entrega y entusiasmo de estos jóvenes valores a los que Zinedine Zidane suele tener junto a él en el banquillo.

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Los chavales, que le endosaron un 1-7 al equipo leonés, hiceron que nadie echara en falta a la 'BBC', el tridente que forman Bale, Benzema y Cristiano. Otro tridente, el que forman Lucas Vázquez, Álvaro Morata y Marco Asensio, brilló con luz propia, sin dejar al margen la tenacidad de los demás compañeros, incluido el magistral gol de Nacho. Todos terminaron por dar a entender al técnico francés que los canteranos blancos tienen la calidad suficiente para que cuente más con ellos a la hora de perfilar el once inicial para recibir o visitar a cualquier adversario.

En la formación que salió de inicio en este primer envite copero, todos eran internaciones, al igual que los tres cambios que realizó Zidane durante el segundo tiempo. El seleccionador español, Julen Lopetegui, cuenta con Carvajal, Nacho, Isco, Morata, Lucas Vázquez y Marco Asensio. Hasta Mariano, que cerró la cuenta de la goleada con un certero remate de cabeza, es internacional con la selección de su país, la República Dominicana. Un grupo de futbolistas de clase más que reconocida que en el Madrid tienen más asegurado ser reservas que titulares, salvo Carvajal, Pepe, Kross y Kovacic.

En la presente temporada Zidane no se está significando por dar credibilidad a los canteranos. La 'BBC' es intocable para el preparador galo porque así lo piensan él y su presidente, quien desde que le fichó como jugador, le admira y pondera. Sin ir más lejos, tres días antes de enfrentarse al Athletic de Bilbao, el preparador galo se reunió en su vestuario con Álvaro Morata y Lucas Vázquez. A los dos les vino a decir que “cuento con vosotros porque sois dos grandes jugadores, pero tengo la obligación de alinear siempre en el ataque a Cristiano, Bale y Bezema”. Evidentemente, es lógico pensar que la 'BBC' tengan asegurada la titularidad dadas sus suculentas nóminas. Una obligación, la de Zidane, aunque no se la dijera a sus interlocutores, que tiene que cumplir a rajatabla el míster, como tantas otras, porque se lo ordena el mandamás del club.

Al francés, a pesar de su educación y se su permanente sonrisa, no le afecta que el trío fuera silbado ante el conjunto bilbaíno, mientras Morata, como ya hiciera frente al Sporting de Portugal en la Champìons, marcó el gol decisivo en el último suspiro de ambos encuentros. Y otro tanto le ocurre q Lucas Vázquez. De poco le sirve al habilidoso y luchador jugador gallego dejarse la piel en el campo. La titularidad no es apta para él. En lo que va de esta campaña 2016-17, Morata ha intervenido en 14 partidos, ha marcado seis goles y jugado un total de 634 minutos. Por su parte, Lucas Vázquez ha saltado al terreno de juego en 12 ocasiones, ha marcado un gol y participado 501 minutos.

Celos por la renovación de Kroos

El malestar de algunos jugadores se ha filtrado en Valdebebas. Y no sólo en lo referente al tema de los más jóvenes de la plantilla, cuyos méritos no se ven recompensados con la titularidad, sino también entre algunos veteranos y considerados pesos pesados. La renovación de Toni Kroos hasta el 30 de junio de 2022 ha levantado más de un ampolla en algunos futbolistas del plantel madridista. Entre estos se encuentra el portugués Pepe, quien, como es sabido, está a la espera de renovar su contrato.

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Las pretensiones del central son estar a la altura de los compañeros que cobran cerca de los 10 millones de euros por temporada. Pepe no oculta su malestar al saber que el mencionado Kroos percibirá un total 120 millones tras la ampliación de su contrato por cinco años, según aseguró el diario 'Bild'. Además de este salario, el jugador teutón tiene suculentas primas y cláusulas en su contrato. Una de ellas, por poner un ejemplo, cobrar 1,8 millones de euros brutos si durante su estancia en el Madrid se otorgaran el Balón de Oro.