Sergi Guardiola, despedido del Barcelona por decir "puta Cataluña" en Twitter

La tranquilidad se había instalado en el mercado de invierno hasta que el Barcelona decidió emplear este período de tiempo para apuntalar su filial. No hay nada de raro en los movimientos que ha hecho el conjunto azulgrana: varios fichajes para tratar de enderezar el rumbo del conjunto dirigido por Gerard López. La clave ha sido el pasado de uno de los jugadores que vestirá la camiseta del Barcelona… después de haber arremetido contra el club azulgrana, contra Messi y contra Cataluña. Destapado por la cuenta de Twitter FCB_datos, la opinión de Sergi Guardiola salió a la luz: varios tweets de hace algunos años en los que animaba al Real Madrid en el Clásico o aseguraba que no pondría a Messi porque “va andando”.

El jugador, natural de Jumilla (Murcia), llegó a la Ciudad Condal procedente del Alcorcón… y su fichaje por el filial del Barcelona fue tan famoso como efímero. La notable repercusión que tuvieron sus comentarios tanto en las redes sociales como en los medios obligaron al la entidad azulgranaa tomar cartas en el asunto. El club rescindió este lunes a última hora el contrato que el jugador había rubricado el mismo día por la mañana después de “comprobar que había publicado tuits ofensivos contra el barcelonismo y contra Cataluña”. Así es comoinformó el Barcelona en la misma noticia que, horas antes, se hacía eco del fichaje de Sergio Guardiola, entre otros futbolistas. Tanto que en la web del equipo, el jugador murciano posó tanto en el momento de la firma como con los que fueron sus compañeros por unas horas.

Sergi Guardiola intentó borrar las huellas de su pasado, pero no fue tan rápido como la velocidad a la que funcionan las redes sociales actualmente. El futbolista, de 24 años, primero borró los tuits y después protegió su cuenta de Twitter, pero ya era demasiado tarde. Los pantallazos con sus comentarios circulaban por la red y en ellos quedaba patente su madridismo y su opinión respecto a jugadores como Leo Messi o sobre Cataluña. “HALA MADRID. Puta Cataluña...”, se podía leer en uno de los mensajes publicados en su cuenta de Twitter. La misma que empleó para asegurar que él no pondría a Messi en su equipo porque “va andando… esttropea el juego del equipo” y para animar al Real Madrid cuando éste se enfrentó al que fue su equipo durante un breve período de tiempo: “Buenos días a todos. Llegó la hora del Clásico. HALA MADRID”.

Julio Rey, el mismo caso

El caso del jugador murciano no es el primero (y probablemente no será el último) que se da en el mundo del fútbol. El pasado verano, el Deportivo anunció el fichaje de Julio Rey para después dar marcha atrás. ¿La razón? Un tuit que el jugador había escrito tres años atrás y que incluía graves insultos hacia el club gallego: “Puta Depor, puta Riazor”. De poco sirvió que cerrase su cuenta o sus posteriores disculpas ya que el conjunto decidió no rematar el acuerdo después de los “desafortunados comentarios vertidos por el jugador en su perfil personal en las redes sociales. El Deportivo entiende que un jugador merece vestir la camiseta blanquiazul si es un ejemplo de deportividad, respeto por los rivales, compromiso y sentimiento positivo hacia el Depor, sus colores, su escudo y los valores que la institución representa”.

Roberto Batres llegó al Alcoyano como uno de los grandes fichajes del equipo en el mercado estival y defendió el escudo en dos partidos. ¿El motivo? Un comentario que escribió en su Facebook y que fue la causa de su despido: “Limpiando y haciendo la maleta que mañana vuelvo a mi casa y como me toque el gordo va a volver su puta madre”. El director deportivo del Alcoyano, Toni Torres, fue el encargado de comunicarle que, en efecto, hiciera las maletas porque no iba a volver a formar parte de las filas del club alicantino. Un caso parecido protagonizó Luxemburgo, exentrenador del Real Madrid. El brasileño criticó en su cuenta de Twitter la actitud de Keirrison en su fichaje por el Barcelona: “Incluso si no es traspasado, conmigo no juega más”. Fue el propio técnico el que confirmó su salida del Palmeiras por este motivo: “Fui despedido por estar en contra de las actitudes de Keirrison”.

La obligada rectificación de Peru Nolaskoain

Mejor suerte corrió Peru Nolaskoain; no fue despedido aunque se vio obligado a rectificar en las redes sociales. El que fuera centrocampista del Juvenil Nacional del Antiguoko (club donostiarra unido a la Real Sociedad) tenía varias ofertas sobre su mesa, pero acabo eligiendo al Athletic Club. Un movimiento más en el mercado de fichajes que no es la nota discordante en su historia. Ésta la encontramos, cómo no, en su cuenta de Twitter. En ella no sólo dejaba caer que el club de San Mamés se veía favorecido por los árbitros, también se alegraba de las derrotas de dicho equipo con goles en fuera de juego e, incluso, llegó a manifestar: “Qué asco me da Aduriz”. Una vez oficializada su salida rumbo a Bilbao, primero protegió su cuenta en Twitter y después se disculpó: “Me toca pedir perdón por lo que he escrito contra el Athletic, nunca se sabe dónde va a acabar uno”.

Un caso parecido fue el de Dani Ceballos, jugador del Betis, que compartió el título de campeón de Europa Sub 19 en su perfil de la red de microblogging. El jugador del Betis se convirtió en 'trending topic' (tema del momento) y no precisamente por la hazaña que acabab de protagonizar. Buceando en su cuenta y retrocediendo hasta 2012, se encontraron comentarios escritos con dudosa ortografía en los que no sólo cargaba contra las mujeres y los gitanos, también insultaba a rostros conocidos por su físico y arremetía contra vascos y catalanes llegando, incluso, a faltar al respetoa jugadores como Piqué. La controversia suscitada llevó al jugador a borrar algunos de sus tuits. Hay estudios que inciden en la importancia de estos perfiles puesto que pueden llegar a influir en su valor de mercado, en su sueldo y, como es el caso de Sergi Guardiola, en su contrato. Y es que las redes sociales se han convertido en un arma de doble filo.