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El Athletic toma con el incidente de Kike Sola las medidas que no tomó con Llorente
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el sevillista sufrió un ambiente infernal

El Athletic toma con el incidente de Kike Sola las medidas que no tomó con Llorente

El verano de 2012 fue muy complicado para Llorente. Cada entrenamiento se convertía en un suplicio por la dureza de la afición cuando dijo que se iba. Sin embargo, entonces el Athletic no hizo nada

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Desde hace tiempo, muchos grandes clubes han puesto complicaciones a los aficionados para seguir los entrenamientos de su equipo. El problema para los grandes equipos no son los seguidores, sino los periodistas y los espías de rivales. Rara vez se cierra una sesión preparatoria por otro motivo que no sea ese, a saber, la posibilidad de dar a conocer tácticas secretas. Pero el Athletic Club ha encontrado otra razón para evitar que entre gente a Lezama: unos seguidores se pasaron buena parte del entrenamiento de este miércoles increpando a Kike Sola.

El delantero fue incordiado por "cuatro individuos que han venido a molestar", como reconoció Markel Susaeta en la rueda de prensa posterior. Estuvieron, por lo que parece, insultándole por su peinado y por su falta de puntería en alguno de los ejercicios que realizaron bajo las órdenes de Ernesto Valverde. El delantero, al acabar la sesión, tenía intención de acercarse con claro nerviosismo a esas personas, pero Gurpegi le frenó.

A partir de ahí y con intención de evitar que se vuelvan a producir incidentes de este tipo, el Athletic ha decidido cortaro por lo sano y cerrar los entrenamientos de este jueves y este viernes, que estaba previsto que fuesen, como el de este miércoles, a puerta abierta. Por tanto, sólo podrán acceder los medios de comunicación durante el primer cuarto de hora en esos dos días, aunque la sesión del sábado se mantiene, por ahora, abierta al público.

Pese a que se trata de un hecho aislado y que en principio no estaba organizado, el Athletic no se lo ha pensado y ha alejado a la afición de sus jugadores. Quizá esa rapidez de ejecución (sea o no correcta en esta ocasión) se echó mucho de menos hace algo más de tres años, cuando se produjeron unos hechos mucho peores de los ocurridos con Sola. Era el verano de 2012, Javi Martínez y Fernando Llorente ya habían confirmado que no iban a renovar sus contratos con el Athletic que acaban el año siguiente. Y esa decisión no fue en absoluto bien recibida por una afición poco acostumbrada a que sus jugadores prefieran marcharse a permanecer fieles al club.

Uno de los entrenamientos fue el colmo del asunto. Varios seguidores radicales, poco asiduos a Lezama, aparecieron por la grada y desplegaron pancartas en las que se podía leer, por ejemplo 'Mercenarios kanpora' (mercenarios fuera) y posteriormente encendieron bengalas y petardos mientras insultaban a los dos jugadores. Todo eso se produjo con el conocimiento y la inoperancia del Athletic, que fue incapaz de frenarlo y que sólo después de producido el daño se atrevió a retirar las pancartas.

Justo unos días después de aquel hecho, Javi Martínez acababa su época en el Athletic tras pagar su cláusula para marcharse al Bayern Múnich. Pero Llorente no encontró una salida y tuvo que permanecer contra su voluntad todo un año en el club bilbaíno, donde dejó de ser titular y los ratitos que jugaba en la Catedral tenía que soportar los pitos de su propia afición. Por fin, en enero de 2013 se confirmó su fichaje para la temporada siguiente por la Juventus.

Desde hace tiempo, muchos grandes clubes han puesto complicaciones a los aficionados para seguir los entrenamientos de su equipo. El problema para los grandes equipos no son los seguidores, sino los periodistas y los espías de rivales. Rara vez se cierra una sesión preparatoria por otro motivo que no sea ese, a saber, la posibilidad de dar a conocer tácticas secretas. Pero el Athletic Club ha encontrado otra razón para evitar que entre gente a Lezama: unos seguidores se pasaron buena parte del entrenamiento de este miércoles increpando a Kike Sola.

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