Bale por fin ejerce de delantero puro… jugando donde él exigió hacerlo

Error de la defensa del Tottenham, robo desde el mediocampo, conducción con el balón y ‘zapatazo’ desde fuera del área. Así fue el primer gol de Gareth Bale esta pretemporada con el Real Madrid para sentenciar el encuentro (2-0), en el minuto 79, ante el equipo inglés y clasificarse así para la final de la Audi Cup que le enfrentará al Bayern de Múnich. Ayudado por la zaga inglesa y por el portero Michel Vorm (que pudo hacer más) pero así es que como le gusta marcar al galés y como más daño hace; con mucho espacio para correr. Por quinto partido consecutivo Bale jugó de mediapunta, donde exigió jugar. Hasta ahora no había respondido y no fue el de este martes un gran encuentro del galés, pero al menos marcó gol, lo que se le pide a un delantero.

“Los de arriba tienen libertad para moverse entre las posiciones, en esa movilidad queremos intentar aprovechar el máximo de movimiento. Sabe lo que tiene que hacer, lo que hay que conseguir es que el equipo mejore a nivel físico y eso significará mejor precisión”, señaló Rafa Benítez tras el triunfo de su equipo. Es una de las razones por las que Bale quiere jugar detrás del punta. Ahí tiene mucha más libertad que jugando en banda derecha, su puesto habitual en sus dos años anteriores vistiendo la camiseta del conjunto blanco. La izquierda es exclusiva de Cristiano.

Además, ahora puede cambiar la posición con el resto de sus compañeros, incluido Cristiano Ronaldo, quien muchas veces acude al centro del ataque. El galés, habló después del partido para medios del club y aseguró que está feliz donde está: “Es genial tener la confianza de todos y espero devolverla con títulos. Puedo caer a la izquierda, a la derecha y puedo entrar por el centro. Me siento cómodo en esa posición”, señaló.

Día para pedirle cuentas

El partido frente al Tottenham era un día perfecto para pedirle cuentas a Bale, y también era un magnífico encuentro para que el internacional galés demostrara su talento y sacara galones. Era el mejor día porque ni Cristiano ni Karim Benzema pudieron asistir a Múnich por lesión. Y su talento lo demostró, pero tardó mucho en sacarlo a relucir: 80 minutos, cuando anotó su gol, pero poco más hizo. No llevó el peso del equipo, tampoco brilló especialmente el Real Madrid, pero Isco, James o Jesé estuvieron más participativos en el juego. Todavía parece estar adaptándose a su nueva posición. Este miércoles en la final de la Audi Cup frente al Bayern tampoco estará Cristiano y quizá tenga otra oportunidad.

No obstante, no es la primera vez que Gareth Bale juega de mediapunta, ni tampoco la primera vez que pide jugar detrás del delantero. En su etapa en el Tottenham fue avanzando poco a poco hasta llegar, en su último año, a ocupar la posición en la que está participando este verano. Con la llegada de André Villas-Boas pasó de jugar de extremo izquierda a enganche. Sus goles también fueron a más, de 13 a 26. Fue elegido mejor jugador de la Premier League y su nombre terminó de llamar la atención. Florentino echó mano de su cartera y le trajo como una gran estrella.

El club blanco sigue confiando en él como su jugador de referencia para los próximos años. Benítez sabe de la importancia del jugador para Florentino Pérez y para el futuro del Real Madrid, y también por supuesto de todo lo que puede aportar: “Como hablé en el caso de Karim, hay muchas especulaciones, no me importan, solo quiero concentrarme y todos van a quedarse aquí”, sentenció el técnico merengue. Bale no se va a marchar del Madrid, y menos cuando esta puede ser la última temporada de Cristiano vistiendo la camiseta blanca. Aquí entra Bale para ser el sustituto del portugués. Benítez consciente de ello sabe que tiene que darle la máxima confianza al jugador de 26 años y sacarle el máximo partido. Seguirá teniendo más oportunidades desde la posición en la que quiere jugar y eso que Isco, James, Benzema y Jesé pueden hacerlo también en ese puesto.