A Ancelotti le pitan los oídos y Florentino ya piensa en sustituirle por Zidane

En el descanso del partido de Ligaentre el Real Madrid y el Villarreal, alque se llegó con empate a cero, el ambiente que se respiraba en el antepalco del estadio Santiago Bernabéu era asfixiante, pero no por la agradable temperatura, sino por los comentarios de los invitados por el presidente.Muchos de ellos erancríticas aCarlo Ancelotti y a algunos jugadores. “No se puede jugar sin motivación”. “El equipo se muestra indolente y sin cohesión en sus líneas, sobre todo desde el batacazo frente al Atlético”. “Yo creo que como no remontemos el vuelo, el italiano saldrá del club por la puerta de atrás, como pasó, por poner un par de ejemplos, con Mourinho y Del Bosque”.

Aunque a los oídos de Florentino Pérezno llegaban todas estascensuras, lo cierto es que el presidente del Real Madridse encuentra cabizbajo y meditabundo por varios motivos: el desangelado juego del equipo, que le llevó a tropezar ante el Villarreal en el Bernabéu (1-1),la cercana visita al Camp Nou, estar implicado, aunque sólo sea en calidad de testigo,en la operación Púnica...

Los que conocen al actual presidente del Madridsaben que es un hombre que pasa del amor al odio en décimas de segundo. La relación con Mourinho, tan paternal y afectuosa, terminó hecha trizas. Por ello, aviso a navegantes, que a nadie extrañe que con el bonachón, sencillo y educado Carlo Ancelotti ocurra lo mismo. Es más: ya secomentaque Florentino Pérez está pensando en que Zinedine Zidane sea el recambio del técnico italiano y dirija al Madrid la próxima temporada.

Aunque le llegan las críticas, Ancelloti no las tiene muy en cuenta. Los éxitos alcanzados el pasado año todavía avalan su trabajo. Sobre todo, conquistar la ansiada décima Copa de Europa que, en caso de no haberlogrado, hubiera provocado queel club saltarapor los aires a nivel institucional, deportivoy social. Un cabezazo de Ramos salvó la cabeza de su entrenador.

“A Ancelotti le falta carácter", se escucha ya

Desde que comenzó el nuevo año, no es la primera vez que en el antepalco del Bernabéu se pone en tela de juicio al entrenador y a más de un jugador, como a Cristiano Ronaldo, Bale, Isco, Benzema… que, según las versiones que se escuchaban, deben demostrar en el campo su capacidad de liderazgo. De Ancelotti, el pasado domingo, se llegó a decir que, en ocasiones “le falta carácter para llamar la atención a los hombres que integran la plantilla madridista”.

En cuanto a los cambios que realiza el italiano, en la mayoría de los corrillos se sacaba esta conclusión: no los hace a su debido tiempo. Los había que aplaudían la sustitución de Isco frente al Villarreal, considerando que su juego es virtuoso, pero que le falta más entrega y tesón cuando hay que echar toda la carne en el asador.

Otros, por el contrario, salieron en defensa delmalagueño basando sus opiniones en que eran momentos para que continuara en el terreno de juego. La cena que convocaron los capitanes con todo el plantel, tampoco ha sido del agrado del presidente y de alguno de sus directivos. Máxime, cuando más de un jugador abandonaba el restaurante a altas horas de la madrugada.

Ahora a esperar acontecimientos que, como bien se sabe, el fútbol es una caja de sorpresas. Los tres próximos encuentros que tiene que afrontar el Madrid, la visita del sábado a San Mamés; recibir al Levante, y acudir a la cita en el Camp Nou, pueden marcar un antes y un después para Carlo Ancelotti, al quepodría reemplazar Zidane para la venidera temporada. Está en los planes del señor Pérez, que ahora mismo mira al futuro con cierto recelo al ver a un titubeante e indiferente Real Madrid.