Del espíritu de Juanito y los premios a pares al alma del Cholo y las ocho faltas del Atleti

Sólo pasaron un par de minutos entre la imagen de Cristiano, Ramos, Kroos y James con los respectivos trofeos que les entregaron en la Gala de la FIFA y el 0-1 de Fernando Torres, un gol que puso aún más cuesta arriba la eliminatoria copera al Real Madrid, tras el 2-0 del Atlético en el Calderón. A los 50 segundos de partido, todo lo que el madridismo había empujado desde horas antes confiando en la remontada se vino abajo.

Paradójico que mientras en el Bernabéu se desplegara una pancarta gigante para celebrar el tercer Balón de Oro de Cristiano Ronaldo, en el entorno madridista más casposo se volviera a invocar al espíritu de Juanito. Como si las multimillonarias inversiones que año tras año hace Florentino Pérez en fichajes no fueran suficiente como para tener que acordarse y recurrir a las viejas glorias.

En este Atlético al que ha vuelto Fernando Torres no hace falta invocar a nadie. El alma se la pone su entrenador. Un Cholo Simeone que técnica y tácticamente tendrá limitaciones -muy lejos en esas facetas, por ejemplo, de Pep Guardiola-, pero que logra que su equipo exhiba unas cualidades tan complicadas como importantes en un fútbol cada vez más individulizado: compromiso, confianza, fe y entrega.

"No hay respuestas individuales", dijo Simeone en la rueda de prensa del Bernabéu cuando le preguntaron por lo mejor de su equipo. El Cholo destacó "el trabajo colectivo" y se negó a afirmar que le tenga comida la moral al Real Madrid. "Es el mejor equipo del mundo", dijo con la clara intención de que se dé más valor a su éxito. El argentino reconoció que en el primer tiempo sufrieron, a pesar de haberse adelantado con el gol de Torres, pero aseguró que en cambio el segundo tiempo de su equipo fue muy bueno.

Mucho -y a veces no sin razón- se cuestiona el juego agresivo del Atlético, pero ayer en el Bernabéu los rojiblancos hicieron 8 faltas, por 15 del Real Madrid. Y esto en un partido en el que le tocó defenderse durante muchos minutos ante el asedio de su rival, lo cual suele ser sinónimo de recurrir a más interrupciones en el juego.

Lo cierto es que si la temporada pasada el Atlético ya fue capaz de vencer (0-1) en Liga en el Bernabéu, una Liga que además acabaría ganando, con el enorme mérito que eso tiene, el derbi madrileño vuelve a tener color rojiblanco. Será casualidad, pero desde que la afición del Real Madrid desplegara aquella pancarta de "Se busca rival digno para derbi decente", la historia ha cambiado. Así, en los últimos seis disputados en el Bernabéu, sólo uno terminó con victoria blanca, precisamente el año pasado en la ida del enfrentamiento copero (3-0).

Entre medias está la final de la Liga de Campeones de Lisboa, en la que un cabezazo in extremis de Sergio Ramos permitió al Real Madrid irse a una prórroga en la que fue muy superior y levantó la tan ansiada Décima. Pero esta temporada madridistas y colchoneros se han enfrentado ya en cinco ocasiones y en ninguna de ellas ha sido capaz de ganar el equipo de Ancelotti. En la ida de la Supercopa de España, 1-1 en el Bernabéu, con goles James en el 81 y de Raúl García en el 88. En la vuelta, 1-0 en el Calderón, con gol de Mandzukic en el minuto 2.

En el enfrentamiento de Liga, disputado en el Bernabéu, victoria rojiblanca (1-2), con un gol de Tiago a los 10 minutos, empató Cristiano, de penalti, a los 25, y sentenció Arda en el 75. A estos tres resultados hay que sumar los de la eliminatoria copera, el 2-0 del Calderón (Raúl García, de penalti, en el 57 y Giménez en el 75) y el 2-2 de ayer en el Bernabéu (Torres en el primer minuto, Ramos en el 20, Torres de nuevo en el 46 y Cristiano en el 54).