Benzema, el otro señalado por el Santiago Bernabéu, se enfrenta a un nuevo juicio

Karim Benzema. Los focos apuntarán hacia la portería, pero el delantero francés no escapará de esos rumores que acompañan sus últimos meses como madridista. La conquista de la Décima parecía haber silenciado esos pitos con los que fue despedido en la final de Lisboa cuando peor pintaban las cosas para el Real Madrid, pero el titubeante inicio de temporada del equipo blanco ha dejado a dos jugadores señalados en el camino.Por un lado, a Iker Casillas y por el otro a Karim Benzema.

El aficionado blanco volverá a juzgar hoy-la afición que acude al estadio del Paseo de la Castellana es más festiva que la de Liga-al francés y al portero. Ancelotti ha querido zanjar el debate con el capitán para terminar con los pitos recibidos desde la grada, pero con el galo la veda está abierta. El Basilea es un rival propicio para que todo quede en el olvido, al menos eso piensa la clase dirigente del Real Madrid, los primeros en querer que regresela tranquilidad al Bernabéu.

El francés renovó contrato con el Real Madrid en el pasado mes de agosto, pero esto no quiere decir que su futuro esté asegurado como madridista. Su examen a partir de estos momentos será constante. El club blanco aplica una máxima en los últimos tiempos, la misma que puso de moda Jorge Valdano, tal y como hemos contado en El Confidencial."Para vender a un jugador no hay nada como renovar su contrato". Dicho y hecho, tal y como se ha podido comprobar con Xabi Alonso.

Ancelotti no tiene muchas dudas respecto al francés. Sigue confiando en él, pero sabe que la aparición de Chicharito Hernández le abre un abanico más amplio de posibilidades. La pasada temporada tenía a Morata como relevo natural, pero hubo partidos en los que tiró de terceros jugadores antes de colocar en el once al ahora jugador de la Juventus. El técnico sigue pensando que Benzema da al equipo mucho más que el gol que le reclama la afición, pero la paciencia tiene un límite.

El francés siempre ha sido del agrado de Florentino Pérez, al que ha defendido de todo tipo de críticas, aunque hace justo un año estuvo tentado de escuchar alguna de las propuestas que se recibieron en la zona noble del Bernabéu por esa apatía que muestra en ocasiones. Los directivos, al menos algunos de ellos, no comparten esa defensa del francés. El presidente confía en el delantero y lo hace porque cree que es el mejor complemento para jugadores como Ronaldo o Bale, pero también porque por su forma de ser admite los errores y, además, cuenta con un entorno que siempre está dispuesto a colaborar y que le hace ver al jugador las circunstancias que en otros futbolistas se vuelven opacas.

Benzema sabe que necesita el gol, que las cosas no están saliendo como necesita el equipo y asume que no esta bien, lejos de su mejor forma. A diferencia de otras ocasiones, su estado físico no es malo. No ha cogido peso y todo obedece a una racha que se prolonga mucho más de lo que un club como el Real Madrid puede permitir. Dos goles en los últimos 18 partidos como madridista es una cifra que no se ha permitido a otros delanteros.

En la pasada temporada, Benzema participó en 52 partidos y logró 24 goles, por los 48 partidos con 20 tantos de la campaña 2012-2013, los 31 de la temporada 2011-2012 en 50 partidos o los 26 tantos en 48 partidos en el estreno de Mourinho. La faceta de goleador nunca ha sido su principal argumento de su fútbol, pero lo cierto es que los 2 goles en 18 partidos es una cifra a la que nunca se había acercado.