El Alcorcón pone en peligro su continuidad en Segunda

El fútbol español se despereza y todos los equipos empiezan a engrasar sus maquinarias en plena pretemporada. El objetivo es estar en las mejores condiciones posibles cuando suene el pistoletazo de salida. Mientras los protagonistas se preparan, la LFP de Javier Tebas sigue adelante con su particular puesta a punto. El nuevo presidente de la Liga llegó pisando fuerte, sabe lo quiere y cómo lograrlo. Uno de los puntos que más revuelo ha suscitado ha sido la tolerancia cero con las deudas que mantienen algunos clubes. El Guadalajara ha sido el primero en experimentar que la LFP va en serio y ahora el balón está sobre el tejado deAlcorcón y Deportivo.

El tiempo corre en su contra. El 31 de julio, la Liga tomará una decisión al respecto y no le temblará el pulso. En Alcorcón lo saben y son conscientes de que su situación es delicada. El verano pasado adquirió un compromiso con la LFP: el equipo madrileño se mostraba dispuesto a alcanzar un presupuesto de cuatro millones (la cifra total de la temporada fue de 4’8 millones contando las ayudas del consistorio local) a través de una ampliación de capital. Un año después no ha cubierto esa cifra o no ha encontrado la forma de hacerlo antes del 31 de julio, fecha en la que la LFP entrará en escena. Si la situación se complica y se enquista, el Alcorcón podría ver cómo se aleja su sueño de ser un equipo de Primera ya que la Liga podría decretar su descenso administrativo.

No sería la primera vez que el fútbol español vive una situación semejante. A principios de junio, el Guadalajara vio cómo la salvación que había logrado por méritos deportivos se quedaba sin validez ante la decisión de la LFP y del CSD. Ambos organismos se basaron en una serie de irregularidades en el proceso de ampliación de capital para decretar el descenso administrativo del conjunto alcarreño después de que la Liga iniciase una investigación a finales de 2012 e interpusiera una querella contra el presidente del Guadalajara por “estafa, apropiación indebida y administración desleal” en el citado proceso. Y es que la tolerancia cero de Javier Tebas, apoyado por el el CSD, ante las deudas e irregularidades económicas de los clubes es implacable.

El Deportivo de la Coruña es otro de los equipos de la Liga Adelante que tiene marcado el 31 de julio en su calendario particular. Al descenso deportivo que se consumó a finales de mayo, se podría sumar el administrativo si no abona los 10’9 millones que debe a sus jugadores. El club gallego no ha conseguido llevar sus cuentas al día: el proceso concursal en el que está inmerso, las deudas que ha acumulado y los sueldos que no ha abonado a la plantilla son el lastre que se cierne como la peor de las amenazas sobre Riazor. La Liga no pierde de vista La Coruña donde el tiempo se agota. Igual que en Alcorcón.