Laporta contrata su seguridad en Suiza por 30.000 euros mensuales

El presidente del FC Barcelona, Joan Laporta, pagará 30.000 euros mensuales a una empresa con sede en Suiza para garantizar la seguridad del club y la suya propia, según ha podido conocer El Confidencial de fuentes solventes. Laporta llevó el tema a la última reunión de la junta del club y forzó la contratación de la compañía, que justificó diciendo que “soy un objetivo del terrorismo internacional”.

En los últimos años, se había encargado de este cometido una compañía de Barcelona, perteneciente al grupo Intelligence Bureau, propiedad de Juan de la Torre. Según fuentes cercanas al club barcelonés, este grupo trabajaba para el Barça desde hace casi un lustro a través de su compañía Cybex, que según la información facilitada es “una división tecnológica formada por ingenieros y abogados pionera en la gestión de pruebas electrónicas en situaciones de fraude y en la prevención de riesgos corporativos en entornos digitales”. Según su página web, Cybex afirma que es la firma “pionera y líder en España de investigación del fraude empresarial y económico en entornos virtuales”.

Uno de los principales cometidos de Cybex durante los últimos años, según reconocieron a este diario fuentes del Barça, fue la prevención de eventuales atentados contra Joan Laporta por parte de grupos de radicales. Cuando accedió a la cúpula del club, el presidente dio órdenes de neutralizar a las facciones más radicales de los Boixos Nois y prohibió su entrada en el campo, diseminando a sus miembros por las gradas. Ello le valió una intensa campaña en contra por parte de los grupúsculos más violentos de los mismos. Este acoso se tradujo en pintadas en su domicilio y en el envío de correos amenazantes contra su persona e incluso su familia, según las mismas fuentes.

Una fuente relacionada con el Barça señala también que Cybex tenía contrato con el club y que trabajó normalmente hasta el año 2008, poco después de la sustitución de Elías Frade por Xavier Martorell como máximo responsable de la seguridad de la entidad. Martorell había sido director general de los Mossos d’Esquadra en los gobiernos de Jordi Pujol. Entre las actividades que realizaba, se encontraba el control de elementos radicales “dentro del estadio durante los partidos de fútbol”.

Murdoch, Tata y el Mossad

Ahora, sin embargo, las tornas han cambiado y la proyección internacional del presidente azulgrana le ha puesto en el punto de mira de oscuros intereses, según dejó traslucir en la última reunión de la junta. Laporta dio sólo algunas explicaciones sobre la nueva empresa que quería contratar y no se extendió demasiado en detalles. Entre otras cosas, afirmó que se llama BPI, que ha sido creada hace poco y que a ella están vinculados el magnate Rupert Murdoch, el fabricante indio de coches Ratan Tata y ex agentes del Mossad israelí. Fuentes cercanas al sector de la seguridad de Israel consultadas por este diario manifestaron desconocer esta empresa suiza.

El FC Barcelona pagará a esta compañía 30.000 euros mensuales, es decir, 360.000 euros anuales para garantizar la seguridad de Laporta y revisar toda la seguridad del club.

No deja de ser curioso que la nueva responsable de seguridad del FC Barcelona tenga su sede en Suiza, uno de los países que Laporta visita con frecuencia y sede también de algunas compañías de grandes amigos del directivo blaugrana. Entre ellas, la empresa Zeromax, del uzbeko Miradil S. Djalalov, para la que quiso hacer de intermediario en la compra del Mallorca, previo pago de la comisión correspondiente del 7% (ver noticia).

Recientemente, el club acordó mantener el cordón de seguridad en torno a Joan Laporta incluso cuando cese en su cargo. “El Barça se ha comprometido a mantener la seguridad de Laporta y de cualquier otro directivo mientras esté amenazado a causa de la defensa de la no violencia en el estadio. Y nadie puede negar que Laporta ha sido el que ha plantado cara a los Boixos y ha erradicado la violencia del Camp Nou”, dice una fuente del club.