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Sainz se la devuelve a Red Bull en la pista: Q3, sartenazo a Kvyat... "y ahora a por todas"
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SACÓ PETRÓLEO CON TODO EN CONTRA

Sainz se la devuelve a Red Bull en la pista: Q3, sartenazo a Kvyat... "y ahora a por todas"

Sainz despejó en un día los tres 'recados' que le dejó el jueves Helmut Marko. A su compañero le endosó casi medio segundo. Y si llueve en carrera, puede rematar la faena a lo grande

Foto: Sainz, sobre el mosaico de la bandera austriaca en una de las escapatorias del Red Bull Ring. (EFE)
Sainz, sobre el mosaico de la bandera austriaca en una de las escapatorias del Red Bull Ring. (EFE)

¿Qué hace un piloto de Fórmula 1 cuando sus jefes le critican en público, le recriminan que "no está suficientemente centrado en la pista" y elogian a su compañero aunque lleve 25 puntos menos? Carlos Sainz contestó a su manera: primero, silencio ante las críticas. Segundo, ante esas "distracciones" fuera de la pista, una 10º posición dentro de la Q3 con casi medio segundo delante de Daniil Kvyat.

No es la primera vez que Sainz responde así con la presión a la espalda. Ya le ocurrió en Austin 2016, cuando empezaba a tantear su marcha de Toro Rosso. Le cerraron la puerta a la salida y luego acabó 6º. ¿Viene otro resultado así en Austria? "Aquí no contábamos con estar tan arriba, pero está siendo una grata sorpresa para mí". Y probablemente también para Helmut Marko...

Otra batalla ganada a la adversidad

El rifirrafe con Red Bull, un futuro aún por definir, su compañero Kvyat tensando la relación interna, y además una avería del motor en los Libres 3 que le quitó más de 30 minutos: Austria es un campo de minas para Sainz. Pero no sólo consiguió sobrevivir al asedio, sino que de momento sale reforzado... "En mi vuelta de Q3, venía bajando una décima y de repente ha salido la bandera amarilla. No he podido rodar con neumáticos nuevos", contaba. Estaba contento con el décimo, pero en otras circunstancias podría haber sido octavo.

placeholder Sainz, sobre el asfalto del Red Bull Ring durante la clasificación. (EFE)
Sainz, sobre el asfalto del Red Bull Ring durante la clasificación. (EFE)

"El coche ha ido mejor de lo que esperábais aquí, ¿verdad?", le preguntaban. No quiso sacar pecho de su vuelta, pero dejó un mensaje clave. "Esto no es como en Mónaco; ahí estábamos Daniil y yo entre los siete primeros...". Y a la vista de que Kvyat terminó 14º y a medio segundo, el pase de Sainz a la Q3 superó las expectativas. De hecho, hasta llegó a ponerse 3º en la Q1. Si Marko salió a 'pincharle' con su compañero, Sainz devolvió el dardo.

De momento, Sainz refutaba con los hechos varios de los argumentos del directivo austriaco . "Entre yo y Red Bull no hay problemas. Está todo dicho; de hecho lo único que me decepciona es no estar rodando en los Libres 3", decía antes de la clasificación.

El "Top-7", clave para rematar el mensaje

¿Qué resultado necesita Sainz para rematar el 'mensaje' de este sábado? "Tengo delante a los Force India; visto lo que ha pasado en las últimas carreras, se cubrirán uno al otro y ahí habrá una oportunidad en carrera. Luego también está Grosjean: el Top-7 es el objetivo". Si se cumple la previsión de lluvia, y como especialista en mojado qué se siente, quién sabe si puede aspirar a un resultado brillante. Que se lo digan a Lance Stroll y su gesta en Bakú...

Aunque Red Bull está en otra órbita y los Force India pueden ser más fuertes, la décima posición –en el enclave de Q3– le sacaría de una zona entre el 12º y el 15º lugar donde resulta muy fácil envolverse en accidentes como el que acabó provocando en Canadá. Por ello, la arrancada será clave. "No voy a encarar la salida de forma más suave por lo que ocurrió en Montreal: iré como siempre. Hasta ahora me ha ido muy bien tomando los riesgos que tomo". En Austria, con una posición más avanzada, ese "Top-7" del que habla puede no ser una utopía.

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"Es verdad que aquí tenemos muchas opciones de puntuar", resumía convencido Sainz. De momento, Sainz ha tirado de talento en momentos cruciales y, en los momentos de mayor tensión, respondiendo sobre el asfalto.

¿Qué hace un piloto de Fórmula 1 cuando sus jefes le critican en público, le recriminan que "no está suficientemente centrado en la pista" y elogian a su compañero aunque lleve 25 puntos menos? Carlos Sainz contestó a su manera: primero, silencio ante las críticas. Segundo, ante esas "distracciones" fuera de la pista, una 10º posición dentro de la Q3 con casi medio segundo delante de Daniil Kvyat.

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