"Décimo". "No, noveno": cuando Alonso exprime la bayeta más allá de lo habitual

Dos periodistas, uno detrás de otro, felicitaban micrófono en mano a Fernando Alonso por su “décima posición” al término de la clasificación del GP de Abu Dabi. A cada uno de ellos el español tenía que corregirles entre sonrisas. “Noveno”. No era la primera vez que lograba esta posición en 2016 (también fue séptimo en Hungría), pero los periodistas iban a piñón fijo, asumiendo que un décimo era el tope de McLaren para el Q3 en Yas Marina.

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“Hemos aprovechado todo el rendimiento del coche hoy y hemos sacado todo lo que era posible sacar de él”. Así de rotundo se mostraba el español tras su actuación de ayer en los últimos entrenamientos de la temporada. En el mismo sentido se expresaron tanto Eric Bouiller como Yusuke Hasegawa. Lo que vulgarmente se llama exprimir la bayeta hasta la última gota.

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Porque Alonso volvió a poner su monoplaza allí donde el “coche no debe estar”, ese singular baremo de talento, confirmando otra vez su especial capacidad de adaptación al comportamiento de cualquier monoplaza que le distingue entre los ingenieros. Como en Brasil, Alonso lo volvió a repetir en Yas Marina si tomamos la referencia del otro piloto del equipo, Jenson Button.

Una sola flecha, y en todo el centro

“Teníamos dudas de entrar en el Q3”. El viernes, Alonso había anticipado a “los de siempre” entre los diez primeros, incluyendo a Force India y Williams. Pero ayer, primero dejó fuera de juego al de Bottas por cuarenta milésimas en el Q2. Con un solo juego de neumáticos nuevos y una única oportunidad, se ‘cargó a Massa en el Q3. Dos motores Mercedes a la espalda. Los dos Force India, prácticamente empatados en sus tiempos, terminaron solo seis décimas por delante. Con un motor Honda.

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El Q3 fue un ejemplo de saber aprovechar el estado de la pista, del neumático, de optimizar al máximo factores como la diferentes temperaturas del asfalto, los reglajes para afrontarla, y las características del circuito. “Hay muchos lugares aquí para cometer un error, muchas frenadas fuertes en las que se bloquean los neumáticos delanteros con facilidad, así que hacer la vuelta buena, en el momento justo, cuando la pista estaba bien, era siempre un reto”. Había una sola flecha en el Carcaj. Pues en el centro de la diana.

La diferencia con Button

“Ambos pilotos hicieron un gran trabajo en la clasificación ya que han optimizado todo el rendimiento que les ofrecía sus coches”, resumía también Eric Boullier al final de la sesión”. Hasegawa repetía la misma idea. Button terminó duodécimo, fuera del Q3. “Según la pista se enfriaba, teníamos que equilibrar el coche con mayor 'grip' en el tren delantero, pero ya no quedaba nada más en el monoplaza, el subviraje me costó algo de tiempo”. Si el británico también afirmaba haber sacado el máximo partido a su monoplaza en el Q2, al final dos décimas le separaban de Alonso.

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“Entrenas en una pista con mucha temperatura por la mañana, luego vas a los entrenamientos y todo cambia, tienes que anticipar esto, haces algunos cambios un poco a ciegas”. Y es necesario adaptarse las circunstancias. Button resulta imbatible cuando su monoplaza está bien ajustado para su estilo personal, pero le cuesta más que a Alonso adaptarse a los defectos.

La agresiva entrada en curva del español y sus numerosos ‘inputs’ al volante para corregir y colocar el monoplaza le permiten compensar mejor a las carencias del monoplaza. En Interlagos, el ‘sufrimiento’ de Button sábado y domingo contrastaba con la mejor adaptación de Alonso al MP4-31. Ayer, aunque de forma menos llamativa, ocurría otro tanto.

"Nadie se fijará en nuestra carrera"

Respecto al gran premio en sí, “hay un grupo interesante por detrás, pero nadie se fijará en esta parte de la carrera”, bromeaba Alonso en relación a la pugna por el título entre Hamilton y Rosberg, y en ese grupo al que se refería y donde se espera batalla están “Force India, Williams, Renault, Haas, nosotros…”. En principio, las simulaciones del viernes de McLaren no parecían invitar a un gran optimismo, pero Yas Marina tampoco es un escenario de fácil adelantamiento.

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Por ello, las posiciones que Alonso pueda ganar al principio resultarán vitales para el resultado final. Ayer se encomendaba a otra de sus agresivas salidas tantas veces protagonizadas en 2016. Y, después a esperar acontecimientos. Quién sabe, quizás también Alonso pueda lograr en Yas Marina otro resultado inusual en la presente temporada.