Ricciardo gana en Malasia y Alonso remontó al séptimo; Hamilton abandona entre llamas

Sorprendente victoria y doblete de Red Bull con Daniel Ricciardo cruzando primero la línea de meta, por delante de Max Verstappen y Nico Rosberg. En un GP de Malasia que Mercedes había dominado contundentemente, un golpe en la salida de Vettel con Rosberg y el abandono a falta de diez vueltas de Hamilton (rompió motor), propició este podio. Fernando Alonso, que partía último, terminó séptimo tras una gran salida y mejor remontada. Terminó "orgulloso". Su McLaren ha dado excelentes síntomas. Carlos Sainz, que partía decimosexto, se quedó undécimo y a tres segundos de los puntos (Toro Rosso es el coche con menos velocidad punta del fin de semana). Genial carrera de Fórmula 1, donde la emoción estuvo desde la primera a la última vuelta.

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"Sebastian está loco", espetó Rosberg; "Vettel se ha tirado a Rosberg como un idiota", exclamó Verstappen. El alemán de Ferrari quiso recuperar terreno en la primera curva y entró pasado, llevándose a su compatriota de Mercedes. El Ferrari quedó tocado y se vio obligado a retirarse (ha recibido tres puestos de sanción en la parrilla de Japón) y a Rosberg le mandó fuera de la pista y a la última posición. Desde allí, Nico comenzó a remontar hasta situarse en tercera posición (con sanción incluida de 10 segundos por adelantar a Raikkonen más allá del límite, según los comisarios). De esta manera, el liderato en el mundial se amplía de los 8 a 23... prácticamente una carrera de diferencia, cuando restan cinco.

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Con estas circunstancias, Red Bull se situó en cabeza y Ricciardo en el liderato. Aunque no se lo encontró por sorpresa, sino que lo tuvo que luchar previamente. Verstappen, con diferente estrategia que los rivales en cabeza, pasada el ecuador de la prueba se situaba con una parada más que el líder, Hamilton, y un gran ritmo. Llegó hasta el segundo puesto de Ricciardo y ahí el australiano se defendió con uñas y dientes. En el muro, Red Bull no dio órdenes de equipo a pesar de que la victoria de Verstappen (Ricciardo debía hacer una parada más) estaba en juego. Finalmente, las circunstancias cambiaron cuando abandonó Hamilton y provocó un virtual safety car. En ese momento, Red Bull prefirió amarrar el doblete y mandó a sus dos pilotos a boxes: Ricciardo por delante de Verstappen. El australiano llevaba dos años sin ganar, y esta temporada en dos ocasiones se la había merecido (malas estrategias en Montmeló y Mónaco).

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La séptima posición de Alonso se fraguó en una vertiginosa salida, en la que adelantó de la última posición a la decimotercera. A partir de ahí, empezando por una primera y acertada parada con el virtual safety car provocado por el accidente de Vettel y Rosberg, comenzó a remontar más puestos y pronto se vio que podía terminar en los puntos. La correcta estrategia unido a un gran ritmo del monoplaza sirvió para hacer bueno el pilotaje y adelantamientos de Alonso. La excelente actuación de McLaren se completó con el noveno lugar de Button. Ambos tenían el motor de Monza, aunque el asturiano contaba con algunas actualizaciones. Para la próxima carrera, en Japón, montarán el motor que el asturiano probó el viernes en Sepang y que tan buen sabor de boca dejó. Suzuka, además, es un perfil de pista que se debe adaptar mejor al MP4-31.

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El cuarto clasificado fue Kimi Raikkonen, quien refrendó que Ferrari es el tercer coche de la parrilla. El finés terminó por delante de su compatriota Valtteri Bottas, Sergio Pérez y Alonso. El asturiano cruzó vio la bandera a cuadros sólo tres segundos después que el quinto clasificado. Hulkenberg, Button y Jolyon Palmer (primer punto que suma en F1) completaron la zona de puntos. Sainz se quedó con la miel en los labios para sumar en su casillero, con ese undécimo lugar. Debe marcharse satisfecho tanto por su nueva 'victoria' sobre Kvyat, tanto como por su salida (del decimosexto al undécimo).