Ferrari se coloca la soga al cuello de 2016 tras lo visto este viernes

“Nosotros podemos mejorar un poco y quizás para ellos fue un gran día...”. Sebastian Vettel sonreía mientras hacía estas predicciones que suenan más a un canto de esperanza que a algo palpable y real. El Red Bull de Daniel Ricciardo terminó por delante de los Ferrari en los segundos libres del GP de Hungría, manteniendo la previsión de que los monoplazas austriacos son favoritos para la segunda línea de parrilla. Algo que, si se cumplen las advertencias de Arrivabene -“después de Hungría no podemos perder más tiempo”-, haría cambiar el objetivo para Ferrari en 2016. Por lo visto este viernes, ya tienen la soga al cuello para dar por finiquitado esta temporada. Aunque "hoy es viernes. Yo no evalúo mucho los viernes. Espera a ver qué pasa mañana", aconseja Vettel.

“No estamos perdiendo tantísimo (con respecto a Mercedes). Nuestro rendimiento está siendo más analizado ahora porque estamos siendo presionados por Red Bull, pero no estamos tan lejos de Mercedes. No podemos reducir de repente toda la distancia, y tampoco dejar de mirar al año que viene. Debemos mantener un cierto equilibrio, como el resto de equipos”. Jock Clear es director deportivo de Ferrari y este jueves, en la rueda de prensa de la FIA, reconoció el dilema al que se enfrenta la Scuderia (“como el resto”). ¿Seguir con un buen puñado de personal centrado en 2016 o inclinar más la balanza hacia 2017? En cualquier caso, que les adelante un rival que tenían antes por detrás no es buena señal, por mucho que hayan mantenido la distancia con el líder.

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El presidente Sergio Marchionne, durante estas semanas, ha pasado revista a su personal en Maranello para tratar de optimizar su cuadro de empleados y, como indicó Arrivabene, tratar de “no perder más tiempo. Tras Hungría no podemos fallar más”, indicaba esta semana. El objetivo de Ferrari es ganar, “no sirve de nada ser segundo”, como ha exclamado más de una vez Fernando Alonso. De tal modo que si Red Bull, actualmente a seis puntos, sale de Budapest por delante de los italianos en la clasificación… Y, por lo visto el viernes, van por ahí los tiros.

En Red Bull, los cálculos son quedar por delante

“Estoy muy contento de cómo ha ido el día. Estamos por delante de Ferrari y eso está bien. Si conseguimos mantenernos detrás de Mercedes, será lo que esperamos”, asegura Ricciardo. Los cálculos en el equipo energético son esos: superar en las curvas rápidas de Hungaroring a los monoplazas rojos. “No estoy del todo satisfecho con el coche. Si avanzamos y mejoramos creo que podemos bajar los tiempos en todos los sectores”, señalaba por su parte Vettel, con otro tono.

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Hace un año, el viernes de Hungría dejó también con un mal sabor de boca a los hombres de Ferrari y terminaron ganando la carrera, sin embargo, esta temporada tendrían que suceder episodios extraños para que la bandera del Cavallino ondee en Maranello en señal de victoria. Mercedes, caracterizado por su virtuosa unidad de potencia, ha demostrado en los dos primeros libres que también posee un chasis espectacular. En los L2 del fin de semana en el que la aerodinámica es vital, Rosberg rodó seis décimas más rápido que Ricciardo. Intratables en cualquier situación.

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“Prefiero no compartir esos detalles aquí, pero sí con Ferrari”, comentó Clear cuando fue cuestionado por las diferencias internas y de funcionamiento entre Mercedes y la Scuderia. El extrabajador de las flechas plateadas, como nuevo jefe deportivo de los italianos, será uno de los que opinen sobre si se debe enterrar el campeonato de 2016, a partir de lo que suceda en Hungría. Su pragmática mentalidad británica tendrá que luchar con el sentimentalismo y la presión latina que caracteriza a Ferrari: “Aquí la pasión que tienen es increíble y es un placer formar parte de esta pasión… pero sabemos que quizás la pasión puede hacer las cosas difíciles alguna vez”.