El exitoso avance invisible de McLaren

¿Qué ha ocurrido este fin de semana en el GP de China para McLaren? Un éxito invisible, que no se aprecia, pero está. Aparentemente parece otro día poco productivo en la oficina, con dos posiciones en tierra de nadie -12 para Fernando Alonso y el 13 de Jenson Button, pero puede que haya supuesto un punto de inflexión para la escudería británica. “Por último y no menos importante he de decir que cuando pusimos a Jenson los neumáticos blandos rápidamente empezó a volar y en la vuelta 46 marcó la vuelta rápida de carrera –que finalmente sería superada sólo por dos pilotos más-”. Eric Boullier, al término del fin de semana, quiso subrayar un hecho que demuestra de lo que es capaz el MP4-31. ¿Por qué no lograron un mejor resultado? Desgaste excesivo de los neumáticos. Si solucionan este problema quizás brillen en Rusia.]

El viernes Alonso sorprendía con la máxima velocidad del día, 339 km/h lograda gracias al rebufo que también pudo haber cogido otros pilotos. Esta anécdota no era para sacar ninguna conclusión seria, pero sí servía para poner en alerta de lo que podía ser capaz la unidad de potencia que en 2015 sólo podía rendir al 70%. Estaba despertando con un balance aparentemente óptimo entre compromiso y fiabilidad.

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El primer día, el asturiano se quejó de “falta de agarre en la parte trasera”. El sábado ese problema estaba corregido y, por primera vez desde que McLaren monta propulsor Honda (más de un año), el hecho de no estar en la Q3 sabía mal. Salieron undécimo y duodécimo con un tiempo marcado con gomas superblandas usadas y sin exprimir al máximo el motor. Habían decidido guardar sus mejores cartas –neumáticos nuevos y mayor compromiso del motor- para la última vuelta, pero una bandera roja arruinó todo el pla: “Aaarg, nooo”.

Con este sabor de boca agridulce, en McLaren se acostaron pensando en puntuar, con permiso “del ritmo”. Ya el domingo, no estar en el top 10 supuso una “decepción” para Alonso y el resto del equipo, tal y como muestra el inicio del comunicado oficial de McLaren: “A pesar de haberse visto algunos indicios de ritmo durante el fin de semana, y ambos pilotos tenían a su alcance pelear por el top 10, finalmente terminamos cerca de los puntos”.

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Hasta que el semáforo se apagó, Alonso y Button sabían que tenían un coche rápido a una vuelta y la duda que tenían que despejar era en tandas largas (el sábado, la lluvia de los L3 impidió trabajar en ello). Al final, China indicó que ese es uno de los caminos por el que deben continuar trabajando: tener un ritmo en tandas largas acorde al que tienen a una vuelta, poniendo atención al desgaste de los neumáticos. “No tuvimos el ritmo suficiente como para sumar puntos, especialmente viendo la escasa degradación de los coches de arriba”, resumió Boullier. Hay que anotar que el asfalto de Shanghai es uno de la que más graining provoca de todo el año.

Para los aficionados de McLaren hay esperanzas en este punto ya que, como indicó Alonso el sábado, ahora este equipo va “pasote a pasote” y a cada dificultad que se encuentra a su paso la resuelve sin excesiva demora. “Ahora deberíamos tener más puntos de referencia para calibrar nuestros puntos fuertes y los débiles”, sopesó Fernando. Y entre esos puntos fuertes, paradójicamente parece que pronto podría estar la unidad de potencia de Honda, a quien Boullier admite que deben “elogiar” por el trabajo realizado. “Aunque todavía tenemos que encontrar más velocidad de la línea recta, las unidades de potencia tuvieron una encomiable fiabilidad a lo largo de los tres días. Igualmente, estamos animados por los desarrollos de esta unidad de potencia, y como resultado, estamos seguros de que nuestro rendimiento global seguirá mejorando a buen ritmo”.

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¿Qué ha cambiado China? Este coche cada vez se parece menos al de principio de temporada (llevamos sólo tres carreras) y, además de mostrar un coche más rápido a una vuelta, ha transformado también la mentalidad del equipo. Ahora ya no vale simplemente ver la bandera a cuadros sin problemas en el motor, tampoco sirve pelear en el grupo medio del pelotón. El crecimiento del MP4-31 ha propiciado que esos objetivos estén caducos. Shanghai ha dado una vuelta más a la tuerca del McLaren, la que permite pensar en los puntos cada fin de semana de aquí a que finalice el año.

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Su crecimiento les dijo que a una vuelta están entre los 10 más rápidos de la parrilla, pero tenían la duda de si también lo eran en tandas largas.

Y la decepción del domingo llegó…

Porque el ritmo del McLaren en tandas largas no era tan bueno como a una vuelta. El problema principal fue que se comía más los neumáticos que el resto.

Deberes para Rusia

Después de otro fin de semana con la mochila cargada de datos, continuarán evolucionando el coche teniendo especial atención en las debilidades, como ese exceso de degradación de sus gomas.