McLaren está en mejor posición que la mayoría, pero ni haciendo todo bien ganaría

“Hicimos lo que pudimos en estas condiciones y estamos, probablemente, en una posición mejor que la mayoría para este sábado”. Jenson Button coincidió con la “sorpresa agradable” con la que calificó este viernes Fernando Alonso su jornada laboral en el GP de Australia. El McLaren funciona y no se rompe, sensaciones que hace más de un año que ninguno de los dos pilotos no sentían.

“Es agradable estar de vuelta en Melbourne. A veces cuando vas a un circuito distinto después de los entrenamientos de pretemporada te llevas una sorpresa agradable y, a veces, una desagradable. Pues hoy nos hemos llevado una sorpresa agradable”, indicó el asturiano, quien añadió que completaron “el programa más o menos ya que hubo un par de cosas que nos pudimos realizar debido a que no rodamos lo suficiente en seco”. Su compañero Button va más allá y apuesta a que McLaren realizó un viernes “mejor que algunos equipos”.

Se respira confianza, se presupone alivio y hay síntomas de esperanza. La normalidad reina en McLaren, después del histórico paréntesis de 2015, cuando no podían prácticamente evolucionar y su monoplaza sólo se podía exprimir a un 70%. Ahora están mejor, que no significa estar bien: “El problema es, incluso haciendo todo correcto, ¡probablemente no podríamos ganar! Pero estamos en una posición mucho mejor que el año pasado”, indica Button.

McLaren por fin puede centrar el tiro.

"Para mañana, nos quedan por probar cosas pendientes al no poder rodar en condiciones de seco, algunas alturas del coche, algunas pruebas de frenos también que teníamos previstas, y no teníamos las mismas condiciones nunca para hacer la prueba", explicaba Alonso. En cuanto a las pruebas de salida, "bien, bueno, a medias, patinaban bastante los neumáticos, pero en condiciones de lluvia no teníamos el embrague reglado para las ruedas intermedias, son pruebas más para el equipo que para nosotros".

“La fiabilidad del coche es muy buena, así que puedes realizar el trabajo de los reglajes antes de la clasificación (a diferencia de 2015). No vamos a ser dos segundos más rápidos que el año pasado, no vamos a pelear en la parte delantera, pero son mejoras que definitivamente hacen de hoy un buen día”.

Quizás este sábado sorprendan con el nuevo sistema de clasificación. Alonso deja abierta esa posibilidad con argumentos: “Para la clasificación tenemos un plan claro y estructurado. Debido a que rodaremos ambos coches a la vez, necesitamos que los dos lados del garaje estén organizados y sincronizados, para que se puedan centrar en los dos coches de forma simultánea. Aun así, es un sistema nuevo y algunos equipos cometerán fallos inevitablemente en las primeras carreras, pero espero que McLaren-Honda no sea uno de ellos”.

Eric Boullier se mostraba satisfecho de una jornada quizás inesperada para McLaren: “Hubiera sido fácil cometer errores, pero hemos hecho todo lo contrario, hemos recogido muchos datos cada vez que la pista estaba limpia, y obtenido así un conocimiento mejor de la dirección que debemos adoptar para el resto del fin de semana. Hoy se ha confirmado que hemos logrado un progreso real, tanto en términos de fiabilidad como de rendimiento."