Hamilton, de la noche a la mañana, consigue recuperarse de una "patada en las pelotas"

Deporte. Este domingo, con su victoria en el intenso GP de Gran Bretaña, Lewis Hamilton encestó ese triple sobre la bocina que mete a su equipo en la lucha a falta del último cuarto. Anotó ese gol en el minuto 45 que sirve para ver la segunda parte de otra manera. Rompió ese servicio que devuelve a un tenista desquiciado al partido. "Ayer (sábado) fue como una patada en las pelotas y tuve que levantarme. Tuve que subirme los calcetines y seguir adelante si quería ganar este campeonato". Convirtió esa canasta, marcó ese gol y realizó ese ‘break’ con el que cortó una racha negativa de tres carreras consecutivas perdiendo terreno con respecto a Nico Rosberg. Deporte.

Ya no era cuestión de recortar 10 puntos o 25, sino de recortar. De cambiar la dinámica que tanto influye en el desenlace de resultado deportivo. "Transformar esa negatividad en algo positivo era mi principal prioridad". Lewis, tras la carrera, dejó ver que no tenía una calculadora en la mano para saber qué era lo mejor o peor. ‘Simplemente’ tenía grabado en su cabeza terminar por delante de su compañero de equipo. Era la única manera de parar la ‘sangría’ que desde Mónaco estaba realizando el todavía líder del campeonato.

"Hoy sentí desde el principio que tenía el ritmo de Nico, y le estaba dando caza como nunca antes. Esperaba una batalla rueda a rueda". Salía sexto, adelantó a dos antes de la bandera roja. Del cuarto saltó al segundo en poco tiempo y el margen de 3 segundos que poseía en esos momentos Nico parecía ser asumible para Lewis. Debía de serlo para no salir derrotado por cuarta carrera consecutiva, y con una diferencia ya peligrosa. De los 36 puntos posibles con los que Rosberg podía haber salido de Silverstone (contando con un 1-2 de Mercedes) se ha pasado a 4. Aunque lo más importante para Hamilton es que se ha reducido la diferencia. La cantidad era un asunto secundario durante este domingo. Hoy, probablemente, ya sí que haya cobrado la importancia que merece ese 25-0.

"Este sábado fue un día muy difícil. No puedo permitir ese tipo de situaciones. Me fui con una terrible sensación para los aficionados, el equipo y yo mismo". Este sábado Lewis no sabía por qué había dejado de acelerar cuando se estaba jugando la ‘pole’ al final de la Q3 y ahora desprende una energía lo suficientemente poderosa como para batir a su compañero de aquí a final de temporada. "Ahora siento que estamos de vuelta y cerca, y con el ritmo que tuve siento que debo enfocar hacia la siguiente parte de la temporada". Cómo cambia la actitud esa canasta, ese gol, ese ‘break’… Deporte.

El sábado ‘luchó’ contra Rosberg y Michael Jordan

Una vez que el apartado de ‘espíritu’ y ‘puntos’ se ha enderezado, a Lewis Hamilton le toca trabajar en el aspecto en el que Rosberg ha destacado sobre el inglés: la "inteligencia", como apuntó esta pasada semana el veterano periodista británico Murray Walker, una conclusión que ha sacado más de uno en el paddock, aunque no lo diga tan claro. Lewis lo admite: "La ventaja es mi habilidad"; y Niki Lauda también es consciente que el inglés "tiene una ventaja de 0,1 y 0,2 segundos sobre Nico" en sus manos.

La clasificación del sábado puso de manifiesto las virtudes y los defectos de cada uno. En mojado, los mejores tiempos parecían ser de Hamilton pero terminó ganando la partida Rosberg gracias a un error de su compañero… y a una inspiración basada en Michael Jordan: "Fallas el 100% de los tiros que no tiras". Lewis, que veía que su tiempo no estaba siendo bueno en ese último intento, abortó su vuelta cuando en el tercer sector se podían marcar diferencias de "entre 4,5 y 5 segundos" (el asfalto se secaba rápidamente), pero "nadie del equipo me avisó". Nico, sin embargo, no cometió ese error… y tampoco le avisaron. "Fue dura la noche", reconoció Anthony Hamilton, padre de Lewis. Peter Bonnington, ingeniero de pista del inglés, tiene una misión en este 2014 para evitar capítulos como este.

Sabiendo que incluso del error del sábado puede aprender y sacar provecho de cara al futuro, el cambio de dinámica de Hamilton ha venido casi en el lugar más adecuado, en casa. Rodeado de su familia y sus fans. Quizás no por casualidad. "Llegué a este fin de semana diciendo que sería genial si los fans pudieran soplar en mis velas para recuperar el impulso. Me dio la victoria de hoy y conseguí los puntos que he estado persiguiendo todo el año, después de perderlos en la primera carrera". La próxima prueba será en Alemania, precisamente la casa de Rosberg. Sólo en el deporte uno se puede recuperar de la noche a la mañana de una "patada en las pelotas"… de la misma manera que se puede volver a caer.