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Dignidad en Vettel para reconocer que debe aprender de su compañero Ricciardo
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PIERDE LOS ENVITES CON SU COMPAÑERO

Dignidad en Vettel para reconocer que debe aprender de su compañero Ricciardo

Con dignidad, el tetracampeón Sebastian Vettel reconoció tras su quinto puesto en el GP de China que el coche no sufría ningún problema, sino él

Foto: Sebastian Vettel antes de subirse al monoplaza este domingo.
Sebastian Vettel antes de subirse al monoplaza este domingo.

Con dignidad, Sebastian Vettel reconoció tras su quinto puesto en el GP de China que el coche "no" sufría "ningún problema", sino él. Cuatro veces campeón del mundo, dominando campeonatos y carreras, durante el último lustro se ha rodeado de récords de precocidad -‘pole’, podio, victoria y Mundial-, se ha engalanado con cuatro Grand Chelems, superó el número de victorias consecutivas de su ídolo Schumacher y Ascari para situar el listón en nueve… y ahora luce como uno más, dentro de la clase media alta. Lejos de buscar excusas, entona el mea culpa sin que se le caigan los anillos.

Atendiendo a la clasificación de los sábados, su compañero Daniel Ricciardo le va ‘ganando’ por 3-1, una situación inversa a la vivida con Mark Webber. En carrera esta situación es similar ya que las dos pruebas en las que los dos RB10 han cruzado la línea de meta, Ricciardo acabó antes. En Bahrein, el australiano superó por 5 segundos a Vettel. En Shanghai, la diferencia ha sido de 25 segundos. "La degradación de los neumáticos era particularmente peor en Seb que en Daniel". Christian Horner dio su punto de vista en esta diferencia de rendimiento.

"No estoy contento"

"Por lo que sé no ha habido problemas con el coche, simplemente no he estado rápido. No estoy contento. Hay mucho trabajo por delante. Daniel se entiende muy bien con el coche y saca lo máximo, es bueno tener esa referencia y, de momento, la distancia es muy grande. Tengo que trabajar sobre eso. Por alguna razón el coche no está donde quiero que esté pero, claramente, Daniel está mostrando que hay más en el coche de lo que yo puedo sacar".

placeholder Sebastian Vettel siendo perseguido por Daniel Ricciardo.

Las declaraciones de Vettel reflejan un pesar que sabe llevar admitiendo su responsabilidad. Tira el ego que normalmente acompaña a un piloto para reconocer el tetracampeón del mundo debe aprender del chico nuevo. Aunque este año haya arrancado de una manera distinta a la que él quisiera, no se ha escondido ni ha camuflado con el monoplaza sus respuestas.

"Necesitamos encontrar la configuración para Vettel, para que pueda volver a ser el ‘cuidador de neumáticos’ de nuevo". Helmut Marko, mano derecha de Dietrich Mateschitz, es consciente de que algo ocurre entorno a su tetracampeón.

Vettel alcanzó la gloria con neumático Bridgestone, con unos Pirelli diferentes al de este año pero, sobre todo, con un sistema de escapes soplados que este año están prohibidos y que fue una de las claves de su gran rendimiento, según destacó Mark Webber en febrero. "Ahora ya no hay difusor soplado por lo que creo que Daniel va a ir bien".

Webber, un ejemplo cercano de inadaptación

Webber fue un ejemplo de la inadaptación a unas reglas de Fórmula 1 en las que no se podía ir al límite con el monoplaza para cuidar los neumáticos, sobre todo desde 2012. En 2010, con Bridgestone, llegó al último gran premio del año con más posibilidades de victoria final que Vettel. "En 2011 (primer año de Pirelli) estaba sólo por detrás de Vettel en la clasificación. Estaba claro que su estilo de pilotaje se adaptaba mejor al monoplaza. En carrera, estábamos mucho más igualados porque tengo muchas vueltas rápidas", explicó Mark, quien admitió que en 2013 su rendimiento no estaba a la altura de su compañero porque las gomas "no son siempre fáciles de entender. Pierdes mucho tiempo si no trabajas bien con ellos".

placeholder Vettel empapando a Webber en Brasil.

Webber no fue el único, Jaime Alguersuari también admitió en 2011 problemas iniciales con los neumáticos aunque éste sí terminó adaptándose con éxito a las gomas. En este 2014 no sólo los neumáticos son diferentes, más duros con respecto al pasado, sino más aspectos de la conducción.

Conducir con todo tipo de coches… ¡y todavía estoy aquí!

"He pasado toda mi carrera saltando de coches con diferentes especificaciones. He conducido V10, V8, he corrido con neumáticos ranurados, de seco, con KERS, con DRS, con control de tracción, sin él, con recarga de combustible y sin ella… ¡y todavía estoy aquí! Obviamente, hay un período de adaptación, pero la forma en que conduzco, trabajando hacia arriba hasta encontrar el nivel de agarre, en lugar de trabajar hacia abajo, siempre ha hecho que sea una transición sin problemas. Como piloto, me encanta el desafío mental de abordar una tarea tan compleja, hay tantas cosas para hincar el diente, y la perspectiva de resolución de problemas tirando de conceptos aparentemente difíciles y encontrar la mejor solución…". Jenson Button no mostró ‘temor’ alguno cuando se le cuestionó sobre el aprendizaje que el piloto debía realizar en esta nueva era de la Fórmula 1. Su adaptación camaleónica le han permitido llegar a este 2014 como el líder de una de las escuderías históricas –y potentes- de la parrilla.

placeholder La foto del sábado, con Hamilton primero, seguido de Ricciardo y Vettel.

"No voy a cambiar ahora, colega… Esto se acabó", sentenció Webber cuando anunció su retirada de la Fórmula 1. ¿Renovarse o morir? Al contrario que el australiano, Button se renovó, y por aquí sigue.

Una adaptación camaleónica

Trasladando el caso a la actualidad, ahora es Vettel quien atraviesa una ‘crisis’ en su relación con el monoplaza y las nuevas reglas. Pilotos como Fernando Alonso, Lewis Hamilton o el propio Button han demostrado una adaptabilidad camaleónica. A Vettel parece que le está costando algo más comparándolo con su compañero y después de escucharle tras la carrera en Shanghai.

Aunque Vettel se haya subido una vez al podio y marche cuarto en el campeonato, la sensación es de que Ricciardo tiene más argumentos que el germano para que Red Bull se decante por alguno de sus chicos en el caso que deba hacerlo en la parte final del campeonato. "Tengo que trabajar sobre eso", reconocía un Vettel que en este aspecto, el de currante, es un número uno. Tiene tiempo de sobra para revertir la situación y que no vuelva a tener que contestar por radio "mala suerte" cuando le avisan de que facilite el adelantamiento a su compañero.

Con dignidad, Sebastian Vettel reconoció tras su quinto puesto en el GP de China que el coche "no" sufría "ningún problema", sino él. Cuatro veces campeón del mundo, dominando campeonatos y carreras, durante el último lustro se ha rodeado de récords de precocidad -‘pole’, podio, victoria y Mundial-, se ha engalanado con cuatro Grand Chelems, superó el número de victorias consecutivas de su ídolo Schumacher y Ascari para situar el listón en nueve… y ahora luce como uno más, dentro de la clase media alta. Lejos de buscar excusas, entona el mea culpa sin que se le caigan los anillos.

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