Hamilton, muy duro con sí mismo: "He conducido como un idiota"

“Simplemente ha sido un mal día”. Sin ganas de hablar, Lewis Hamilton atendió a las cámaras de Antena 3 porque sabe que es su obligación. Si fuera por él, este sábado se hubiera ido directamente a jugar con su perro Roscoe a su hospitality, porque se le notó muy disgustado al no clasificarse a la Q3 por primera vez en 67 carreras. No obstante, cuando atendió a la prensa española, ya estaba un poco más relajado puesto que anteriormente, ante los ingleses, dijo directamente que había “conducido como un idiota”.

“En general fue una sesión de clasificación pobre. Conduje como como un idiota. Es la peor vez que he conducido en mucho, mucho tiempo. Lo siento por el equipo”. Muy duro consigo mismo, no puso excusas, ni siquiera que su examigo Adrian Sutil le pudiera haber molestado en la última curva –Parabolica- cuando estaba en su vuelta lanzada, “no pasa nada. Ya debía haberlo hecho bien en la vuelta anterior”.

El asombro no sólo vino de parte del piloto inglés, quien había logrado las últimas cuatro ‘poles’ del año, también se quedó perplejo Niki Lauda. El austriaco, sentado en una silla dentro del box de Mercedes, dio unos toques en la pierna del manager de Hamilton pidiendo alguna explicación a lo ocurrido. Como queriendo decir que el coche estaba bien y había sido ‘culpa’ del piloto… Niki estaba en lo cierto.