Vettel gana por primera vez 'su' GP de Alemania con Alonso en cuarto lugar, tras los dos Lotus

Sebastian Vettel, por fin, pudo ganar por primera vez la carrera de su casa, el GP de Alemania. El germano cruzó la línea de meta justo por delante de Kimi Raikkonen y tras este acabó su compañero de equipo Romain Grosjean, que aguantó a un Fernando Alonso que remontó desde la octava plaza de salida al cuarto lugar. La prueba en Nürburgring refuerza a Vettel como líder destacado en el Mundial con 34 puntos de distancia sobre el asturiano.

Era una carrera señalada en el calendario de Vettel. A sus tres años plagados de victorias todavía le faltaba la más especial, la de casa, con su gente. "Victoria en casa, finalmente", le recordaba un compañero suyo instantes antes de saltar al podio. Era la primera vez, desde 2006, que en F1 sonaba el himno alemán en Nurburgring (la última vez lo hizo Michael Schumacher). Y no lo tuvo fácil.

Después de una jornada de sábado en la que Lewis Hamilton había arrebatado por un suspiro la 'pole' a Vettel, el alemán debía realizar una buena salida para comenzar con los menos problemas posibles la prueba. Y así fue, los dos Red Bull encabezaron pronto la carrera. Por detrás, Alonso mantuvo el octavo puesto de salida con gomas medias (al igual que Felipe Massa), un compuesto diferente al resto de sus rivales.

Un herido por un mal cambio de Red Bull

El plan de Ferrari era estirar al máximo su primera parada sabiendo que los blandos se 'fundirían' pronto... pero resultó que los blandos aguantaron más de lo pensado y los medios algo menos. De hecho, Alonso entró a boxes en la vuelta 12 y Grosjean una después (con blandos). En esta primera parada Mark Webber protagonizaría el segundo incidente de la carrera -el primero fue el abandono de Massa- cuando no le pusieron bien una rueda y ésta terminó impactando en un cámara de la FOM (llevado a un hospital pero sin consecuencias graves). Nueva carrera para el australiano que se situó último y, felizmente para él, concluyó séptimo con una espléndida remontada.

Por delante, quienes mejor pinta tenían eran los Lotus, que amenazaban la victoria a Vettel. Fernando Alonso, con el abandono de Massa, el fallo de Red Bull sobre Webber y los adelantamientos a Daniel Ricciardo (salía sexto y se quedó a las puertas de sumar puntos) y a Hamilton, dibujaba un más que factible cuarto puesto desde la mitad de la prueba. Y así terminó.

Surrealismo con un coche marcha atrás y sin piloto

En el ecuador de la carrera, cuando la situación parecía favorable a Vettel, un safety car 'surrealista' puso emoción y presión sobre el actual campeón. El coche de Jules Bianchi, que tuvo que abandonar por una avería, comenzó a caer pendiente abajo y cruzando la pista de lado a lado con el piloto observando la escena desde el muro. En pocos minutos se pudo ver una rueda volando por el pit lane y un coche sin piloto rodando marcha atrás por una recta del circuito...

Este coche de seguridad provocó una nueva entrada a boxes y redujo al mínimo las distancias entre los de arriba: Vettel, Grosjean, Raikkonen y Alonso. A partir de aquí la estrategia sería fundamental para tratar de ganar alguna posición en carrera entre estos hombres. Lotus, con dos 'piezas' en el tablero, mandó entrar a Grosjean mucho antes que a Kimi. Red Bull reaccionó y cubrió posición con el francés. Mientras, Raikkonen y Alonso alargarían mucho la última parada para 'calzar' gomas blandas al final y así poder atacar.

La única variación que hubo fue el adelantamiento en pista, y al segundo aviso por radio, de Raikkonen sobre Romain. Pero ni Lotus fue capaz de dar alcance a Vettel (Kimi se quedó a un segundo) ni Alonso a algún Lotus. El alemán de Red Bull supo manejar a la perfección cada situación que se le presentó, y eso que no tenía el mejor coche.

Estos tres equipos, Red Bull, Lotus y Ferrari, se mostraron muy superior al resto y, mientras las diferencias entre ellos fueron escasas, el resto de equipos cruzó la línea de meta muy atrás. Hamilton fue quinto a 22 segundos de Alonso. Detrás del inglés vino su compatriota Jenson Button. Sergio Pérez fue octavo y la zona de puntos la cerraron Nico Rosberg (9) y Paul di Resta (10). Mercedes, en cuanto ha salido el sol y en contra de lo que se podía pensar, ha demostrado que sigue con severos problemas de degradación.