Pat Fry y Ferrari, en busca de la "felicidad" para 2013

"No seré feliz hasta que tengamos el coche más rápido, califiquemos primero y segundo, y finalicemos primero y segundo (en carrera)". Pat Fry, director técnico de Ferrari, es exigente en cuanto a sus propósitos de cara a 2013. Que su dicha sea paralela al rendimiento de los monoplazas indica lo duro que ha sido la temporada que acaba de terminar para él, aunque prefiere no hacer más leña del árbol caído… "En términos de fiabilidad, pitstop y estrategia, pondría al equipo un nueve de diez. En términos de actuación del monoplaza, todavía teníamos falta de ritmo a final de año y teníamos a dos principales rivales". Prefiere no mojarse en este sentido.

En una entrevista concedida al equipo transalpino, el británico repasa el año en el que han logrado dos subcampeonatos –pilotos y constructores-  a pesar de tener en contados momentos del año un vehículo completo, que rindiera tanto el sábado como el domingo. "Si miras a la actuación y al desarrollo que hemos tenido a lo largo del año, hicimos un gran desarrollo de febrero a julio. Después, luchamos por encontrar rendimiento en el túnel de viento con los datos que llevábamos a pista, pero tuvimos problemas de correlación". Los datos obtenidos en pista no encajaban con los del ordenador del túnel… de ahí que se optase por reformarlo y trabajar en el que Toyota tiene en Colonia.

Se ha venido repitiendo desde el verano que el F2012 no era un coche lento o malo en términos generales, ya que ‘simplemente’ fallaba el sábado. Fry recalca este punto y señala que sólo en un par de pruebas pasaron verdaderos apuros. "Está bastante claro que en dos de las veinte carreras no hemos tenido el monoplaza más rápido, pero en las demás hemos estado al ritmo de los otros. Creo que el equipo ha hecho un gran trabajo, incluso para finalizar segundos en los dos campeonatos".

En Sao Paulo y tras acabar el Mundial, Fernando Alonso quiso reseñar que en este invierno habría "trabajo extra" con lo que las vacaciones se verían reducidas. Al igual que Fry, el asturiano y el resto del equipo serán más ufanos si en Australia logran colocar a sus dos monoplazas en primera línea de la parrilla. Ya no sólo trabajarán por realizar una gran labor y conquistar un título, sino para alcanzar la "felicidad".