La pelea en la NBA que acabó con la rajada del año: "Arbitrar es un trabajo de mierda"

Esta madrugada, el partido entre Indiana Pacers y Philadelphia 76ers fue uno de los más tensos de la NBA. Tanto, que acabó con una doble expulsión que provocó una de las rajadas del año. Y es que Paul George, uno de los jugadores involucrados en la tangana, vio el camino de los vestuarios, en su opinión, de manera injustificada, pues no sólo sufrió golpes constantes durante el partido, sino que fue expulsado después de sufrir una agresión directa.

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Rubén Rodríguez

El duelo entre Paul George y Gerald Henderson fue uno de los más intensos de la noche. Cada vez que se vieron las caras en pista, las chispas saltaban entre ellos: el escolta de los 76ers buscaba constantemente el contacto con el campeón olímpico, quien tampoco se arrugaba y no rehusaba el contacto. Con el paso de los minutos, la tensión iba 'in crescendo', hasta que llegó la explosión definitiva a 2:59 minutos para que acabara el encuentro.

Después de un partido de mucho contacto -en el que los Pacers ganaron por 111 a 120-, en el último cuarto saltaron las chispas: primero, los colegiados pitaban falta en ataque a George después de que las imágenes reflejaran claramente que Henderson le había agarrado y tirado al suelo; sólo dos minutos después, llegó el momento clave. El jugador de Philadelphia, en una entrada a canasta, soltó un duro codazo al cuello de George, que quedó tendido en el suelo.

Los árbitros decidieron parar el partido, entendiendo que el constante enfrentamiento entre ambos debía de parar. Y, tras revisar la jugada en la televisión, decidieron que la opción correcta era expulsar a ambos jugadores del partido. El castigo sobre Henderson parecía evidente, pero la incredulidad de George al ver que también había sido sancionado se convirtió en un monumental enfado, que demostró públicamente al término del partido.

"No tengo fe en los árbitros... Les avise toda la noche de lo que me estaba haciendo Henderson. y permitieron que siguiera con esas mierdas. Me estuvo lanzando puñetazos y golpes al estómago todo el partido, y al final me soltó un codazo en el cuello", señalaba indignado George. "Arbitrar es un trabajo de mierda. El caso es que los árbitros le dejaron hacer lo que hizo, y ese es el problema", finalizó el jugador de los Pacers.

Y es que George no entendió por qué acabó expulsado. "Nunca traté de golpear a George intencionadamente", se disculpó Henderson públicamente, ante lo que el jugador de Indiana no quiso responder: "Paso de Henderson". La última pelea en la NBA acabó con la expulsión de los dos involucrados, un castigo ante el que Paul George se mostró indignado. Eso sí, le puede caer una importante sanción después de su rajada al término del partido.