Jason Collins revoluciona la NBA al ser el primer jugador en anunciar su homosexualidad

Jason Collins ha revolucionado la NBA. El pivot norteamericano ha confirmado su homosexualidad en una carta abierta publicada en Sport Illustrated, convirtiéndose en el primer jugador en activo en hacer pública su tendencia sexual. A sus 34 años, Collins cree que ha llegado el momento de dar a conocer su 'secreto', considerando que este hecho le liberará y le permitirá ser "auténtico y verdadero".

"Tengo 34 años, soy negro y soy gay". Así comienza la 'confesión' de Collins, en la que asegura que después del 'lock-out' de la pasada temporada comenzó a plantearse la posibilidad de hacerlo público, pero que no fue hasta el atentado de Boston cuando se convenció de que había llegado el momento de contarle la verdad a la afición, sin miedo a que la gente pudiera conocer cómo era él realmente y se le siguiera valorando con normalidad en la cancha.

Todo ello le sirvió para anticipar su aparición pública, convirtiéndose en el primer jugador en activo en confesar su homosexualidad en la NBA: "El 'lock-out' creó un cambio en mis rutinas, lo que me llevó a enfrentarme a pensar en lo que realmente soy y quiero. Tras lo de Boston, me reforcé en la ida de que no tenía que esperar al momento perfecto, pues todo podía cambiar en un segundo. ¿Por qué no vivir con la verdad?", asegura.

Después de más de doce temporadas en la NBA, en la que ha jugado en seis equipos y ha disputado dos finales, Collins ha decidido dar un importante paso adelante en su vida, que espera que no le afecte en su carrera. Actualmente es agente libre -"en sentido literal y figurado", ha indicado-, pero su intención es seguir jugando al baloncesto en activo durante un par de años más. De momento, ya se siente "orgulloso de haber iniciado el debate".

El propio Collins ha confesado que, a lo largo de los años, siempre se trató de convencer de que su vida debía progresar por unos cauces que no eran los que él sentía como propios: "Cuando era joven, incluso llegué a plantearme comprometerme con una mujer y tener hijos con ella, pero aunque traté de convencerme de que el cielo era rojo, yo tenía claro que era azul", comenta en el reportaje a Sport Illustrated.

Sin duda, la confesión de Collins dará mucho que hablar, pues es el primer jugador de la liga más importante del mundo en confesar su homosexualidad. A sus 34 años, espera que tener ofertas de alguna franquicia para poder seguir en la NBA la próxima temporada. Su declaración se ha convertido en uno de los grandes pasos adelante en el deporte mundial, en el que pocas confesiones como la anterior han tenido lugar.

Apoyo de la Casa Blanca, Kobe Bryant y Pau Gasol

"Vemos esto como otro ejemplo del progreso que hemos hecho y la evolución que ha tenido lugar", comentó el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, cuando fue preguntado al respecto. Carney, que admitió que no había hablado directamente con el presidente Barack Obama sobre el asunto, indicó: "Elogiamos su coraje, le apoyamos en este cometido y esperamos que sus fans y su equipo también lo hagan de aquí en adelante".

Por su parte el comisionado de la NBA, David Stern, dijo en un comunicado: "Hemos conocido a la familia Collins desde que Jason (y su hermano Jarron) se unieran a la NBA en 2001 y han sido miembros ejemplares de esta familia. Jason ha sido un jugador y compañero muy respetado durante toda su carrera y estamos orgullosos de que haya asumido el liderazgo en este asunto tan importante".

Kobe Bryant, jugador de Los Ángeles Lakers, apuntó por su parte vía Twitter: "Estoy orgulloso de Jason Collins. No asfixies quién eres debido a la ignorancia de otros". El jugador acompañó ese mensaje con etiquetas que rezaban "valor" y "apoyo". Por su parte, el español Pau Gasol indicó en su cuenta de Twitter: "Mucho respeto al valor demostrado por Jason Collins. ¡La 'familia NBA' te apoyamos, Jason!"

Asimismo, Bill Clinton sostuvo que conoce a Collins personalmente puesto que fue compañero de clase de su hija, Chelsea, en la universidad de Stanford. "Su anuncio de hoy es un momento importante para el deporte profesional y para la comunidad de gais y lesbianas. Es un comunicado directo de un buen hombre que no quiere más que lo que muchos buscamos: poder ser quienes somos, hacer nuestro trabajo, construir familias y contribuir a nuestras comunidades", indicó el exmandatario.