El campo atrás de Llull: el pez grande se comió al pequeño con un error arbitral

Para ganar al MoraBanc Andorra en los cuartos de final de la Copa del Rey, el Real Madrid necesitó lo mejor de casi todos sus jugadores y un poco de fortuna, la que hace falta para que los árbitros se equivoquen a tu favor en la jugada decisiva. Antes de pasar a Anthony Randolph para que anotara el triple que forzó la prórroga a 4,7 segundos para el final, Sergio Llull cometió campo atrás al pisar la línea del centro del campo. Ni Dani Hierrezuelo ni Francisco J. Araña, los dos árbitros mejor colocados, lo vieron.

No fue el único error del partido, ni siquiera el más protestado en el Buesa Arena, pero sí el más importante. Un error arbitral es igual en el primer minuto que en el último, pero sus consecuencias no. Cuanto más cerca está el final, menos capacidad de reacción hay. Y ese enterró las opciones del MoraBanc Andorra.

"No quiero pensar que el partido lo hemos perdido por los árbitros. Habría que verlo, pero no quiero pensar en eso", declaró David Navarro, jugador del Andorra. Era muy difícil ver si Llull pisaba o no, pero eso no resta gravedad al fallo. Si el MoraBanc Andorra hubiera recuperado el balón a menos de diez segundos para el final con tres puntos de ventaja, es bastante probable que estas líneas versaran sobre una de las mayores sorpresas de la historia de la Copa y no sobre un error arbitral.

“Nuestra opción era no dejar el triple. Llull lo hace bien, pero parece que pisa. No lo he visto, me lo han dicho", dijo Joan Peñarroya, técnico andorrano. Tras los dos tiros libres metidos por Andrew Albicy, que dejaron el marcador en 83-86 a 14,4 segundos para el final, Randolph sacó de fondo para Llull, que subió el balón. El base es el que suele jugarse el último tiro en el Madrid, así que el Andorra intentó evitar que lanzara con la defensa de Thomas Schreiner, cuya presión hizo retroceder tanto a Llull que pisó la línea que atraviesa el logo central de Movistar.

Oliver Stevic ayudó a su compañero, pero su ayuda fue tan larga que Randolph se quedó solo. Tanto, que le dio tiempo a recibir de espaldas a canasta, darse la vuelta botar y lanzar. “Llull me pasó el balón y fue un gran pase que me permitió anotar y forzar la prórroga”, dijo el estadounidense, ajeno a la polémica.

"No he visto la jugada del campo atrás, pero creo que si comentamos cada jugada nos equivocaríamos. Pero si ha sido realmente campo atrás, pues lo puedo reconocer. Pero los partidos no se resumen en una jugada", dijo Pablo Laso en rueda de prensa. Tiene razón, los partidos no se resumen en una jugada, pero sí basta para que sean recordados. Que se lo digan al MoraBanc Andorra.