Raúl López, el mago de los Júniors de Oro, anuncia que se retira a final de temporada

Raúl López Molist (Vic, 1980) se retira. El base del Dominion Bilbao Basket, exjugador del Joventut de Badalona, Real Madrid, Utah Jazz, Akasvayu Girona, Khimki y de la selección, pondrá fin a su carrera a final de temporada, según ha anunciado este jueves su actual equipo. López no hará declaraciones hasta la previa de la última jornada de la Liga Endesa.

El baloncesto español dice adiós a uno de sus mejores bases, un director de juego cuya carrera ha estado marcada por dos graves lesiones de rodilla que sufrió en 2001 y 2002. "Creo que es el momento correcto para dar este paso, considerando que todavía Raúl es un muy buen jugador y su orgullo, competitividad y carácter no le permitirían estirar el chicle hasta el punto de no ser útil para su equipo en la cancha", comenta a El Confidencial el seleccionador nacional, Sergio Scariolo, que lo fichó para el Real Madrid en el año 2000 y luego lo entrenó también en el Khimki y la selección. "Creo que ha tenido una trayectoria importantísima y que ha sido uno de los jugadores de más talento técnico del baloncesto español de todos los tiempos. Solo las lesiones le han impedido ser un jugador de importancia en la NBA".

Raúl López comenzó a jugar en el Club Bàsquet Vic, y de ahí pasó al Joventut de Badalona en 1995. Con la Penya debutó en la ACB en abril de 1998, con 18 años recién cumplidos, de la mano de Alfred Julbe. Jugó 18 minutos en la última jornada de la liga regular y anotó 10 puntos. A partir de ahí todo fue a una velocidad de vértigo: con 19 años ya había debutado con la selección y con 20 lo fichó el Madrid por 300 millones de pesetas y disputó los Juegos Olímpicos de Sídney. Era, junto a Juan Carlos Navarro, Pau Gasol y Felipe Reyes, la nueva cara del baloncesto español. Los cuatro formaron parte de los Júniors de Oro campeones de Europa en 1998 y del mundo en 1999.

Pero llegaron las lesiones y todo se frenó, incluido su debut en la NBA. Los Utah Jazz lo habían elegido en el puesto 24º del 'draft' de 2001; veían en él al sustituto de John Stockton, "uno de los mejores bases puros de la historia de este juego", recuerda Scariolo. "Es una referencia bastante importante", dice el seleccionador. López se pasó en blanco su primera temporada y no debutó hasta la 2003-2004, en la que jugó 81 partidos.

En 2005 regresó a España para jugar en el millonario proyecto del Akasvayu Girona. Luego regresó al Real Madrid, donde ganó una ULEB Cup y una Liga ACB entrenado por Joan Plaza. En esa época regresó a la selección, con la que no jugaba desde 2002. A la medalla de bronce en el EuroBasket 2001 sumó la plata olímpica de Pekín 2008 y el oro europeo de Polonia 2009. Tras pasar por el Madrid fichó por el Khimki, donde jugó dos temporadas antes de volver a España para fichar por el Bilbao Basket, donde ha permanecido desde 2011 y se ha convertido en una de las referencias y uno de los jugadores más queridos por la afición.

"Es un excelente compañero, un excelente profesional. Un chico algo diferente al promedio de la generación de la 'Play Station', uno de los pocos que puedes ver todavía frecuentemente con un libro en la mano. Es un jugador y una persona que merecen la pena", afirma Scariolo.

Raúl López es una caja de fundamentos, un manual del buen base, a pesar de que las lesiones le han obligado a readaptar su juego. "Antes de la lesión tenía una velocidad de ejecución y sobre todo de lectura y de intuición de lo que pasaba en la cancha absolutamente superior", explica Scariolo, que destaca la capacidad de liderazgo del base catalán. "Es uno de los jugadores más respetados por los grandísimos de nuestra generación. Siempre ha gozado de un grandísimo respeto por parte de sus compañeros".

"Dentro del mundo del baloncesto la consideración que se tiene hacia él como jugador y como persona es absolutamente parecida a la de los mejores Júniors de Oro, sin ninguna duda. Igual fuera menos, porque las lesiones le han quitado muchos años de NBA y unos cuantos títulos, pero en el mundo del baloncesto desde luego no es así".