Braulio elegía sus víctimas "al azar" y antes de ir a entrenar con el Zaragoza

Braulio Nóbrega se ha convertido en noticia en los últimos días, y no precisamente por sus méritos deportivos. El delantero del Zaragoza ha reconocido ser "culpable" de un delito de agresión sexual después de que una mujer de 32 años le reconociera y le denunciara ante las autoridades. El jugador aseguró haber llevado a cabo tres agresiones más, mientras que la jueza busca, al menos, a otras cinco posibles víctimas suyas.

El ariete nacido en Fuerteventura ha reconocido ante la jueza que lleva el caso haber cometido los hecho denunciados por la joven de 32 años que interpuso la denuncia contra el jugador. Braulio asegura que se trató de un "rápido toqueteo antes de salir corriendo", además de reconocer haber realizado más episodios que el denunciado, siempre en la misma zona y a la misma hora del día.

Padre de dos niños, todo hace indicar que los sucesos, acaecidos en la zona de Cuarte de Huerva, se llevaban a cabo entre las 9 y las 9:30 horas de la mañana, presumiblemente después de llevar a sus hijos a la escuela y antes de acudir al entrenamiento de su equipo en la Ciudad Deportiva. El jugador ha reconocido llevar a cabo las agresiones "sin ninguna preparación previa" y eligiendo las víctimas "al azar".

Braulio, además, reconoció haber realizado "otras tres" acciones similares en el últimos mes, y la Policía ha recibido el mismo número de denuncias telefónicas de mujeres que han asegurado haber sido atacadas en el mismo lugar y entre las horas comprendidas en las que asegura el jugador que cometió los delitos. Además, dos de ellas aseguran que su agresor portaba ropa deportiva en el momento del suceso.

Sin embargo, ésta no es la primera vez que Braulio lleva a cabo un hecho similar. En 2008, ya fue denunciado por acoso sexual, en este caso después de realizar múltiples llamadas telefónicas a un peluquería excesivamente elevadas de tono. El fútbolista se mostró sincero en el interrogatorio, colaborando con las autoridades en todo momento y reconociendo que tiene un grave problema: "necesito ayuda", indicó el ariete.

El Zaragoza ha decidido tomar cartas en el asunto, y rescindirá el contrato de Braulio por la gravedad de lo ocurrido. Después de dejar el juzgado en libertad con cargos, el jugador se enfrenta a un posible pena de cárcel de entre uno y cinco años, situación que ha propiciado que el conjunto maño aparte al jugador de su disciplina y rompa su relación con el jugador antes de que finalice su contrato en 2012.