El último capricho de Philip Seymour Hoffman
Cuatro años después de su estreno y tres meses después de , llega a nuestros cines la primera película como director del malogrado Philip Seymour Hoffman. Una
Tres años después de su estreno en Estados Unidos y seis meses después de su muerte, llega a nuestros cines la primera -y a la postre, última-película como director del malogrado Philip Seymour Hoffman, Una cita para el verano.
Y llega a nuestra cartelera, no porque sea un filme a tener en cuenta, sino simple y sencillamente por la posibilidad de descubrir a otro Hoffman, el director, quien si bien da señales de tener talento detrás de la cámara, alumbra una cinta sosa y sin fundamento.
Rodada con un pequeño presupuesto y con la colaboración de sus compañeros habitules en los escenarios de Broadway,elfilm está basado en una obra de teatro del autor y director Robert Glaudini, quien también participó en su adaptaciónparaelcine.
La cinta cuenta la historia deJack,un chófer de limusina interesante, emotivo y algo inadaptado socialmente, que pasa la mayor parte del tiempo con su amigo Clyde y su mujer, Lucy. Gracias a ellos, conoce a la frágil y torpe Connie, de quien se enamora.
Para seducirla, Jack aprende a cocinar con tenacidad, empieza a soñar con una nueva carrera profesional e incluso aprende a nadar. Su objetivo es cumplir la promesa que le ha hecho a Connie en su cita: un paseo en barco por Central Park.Mientras la relación de Clyde y Lucy comienza a hacer aguas, la de Jack y Connie intenta superar los bloqueos sin renunciar a su ideal…
Una trama aparentemente interesante, pero que va perdiendo cualquier atisbo de atractivo conforme la historia avanza. Y eso que la interpretación de Seymour Hoffman es sobresaliente,de esas para disfrutar plano a plano, secuencia a secuencia.
Sin embargo, la cinta se queda en eso, en brillantes interpretaciones. Nada de emociones. Sólo al final, cuando ya es demasiado tarde para atrapar la atención del espectador,la cinta remonta y logra brindar unos minutos de diversión.
Una cinta que a buen seguro nunca hubiera sido estrenada en nuestro país de no ser por las circunstancias y que en manos de otro director hubiera pasado completamente desapercibida. Alabar un filme así, simplemente porque lleve la firma del fallecido Hoffman, desmerece a uno de los actores con más talento de las últimas décadas.
Una cita para el verano
Director: Philip Seymour Hoffman
Guión: Bob Glaudini
Duración: 89 minutos
Género: Comedia romántica
Nacionalidad: EEUU
Tres años después de su estreno en Estados Unidos y seis meses después de su muerte, llega a nuestros cines la primera -y a la postre, última-película como director del malogrado Philip Seymour Hoffman, Una cita para el verano.