El Coro Nacional, pendiente de Hacienda

La pelota está en el tejado del Gobierno. Y, más en concreto, la última palabra la tiene el Ministerio de Hacienda. Mientras tanto, la huelga del Coro Nacional de España convocada para este viernes, sábado y domingo sigue adelante a la espera de un compromiso “político verificable” de que se va a aumentar la mermada plantilla de la institución.

Los representantes sindicales del Coro Nacional se reunieron ayer con la nueva directora general del INAEM, Montserrat Iglesias, para intentar desbloquear el conflicto laboral que llevan meses arrastrando a causa de la amortización de las jubilaciones de los coristas. Los cantantes piden que se saque a oferta de empleo público las plazas vacantes que han dejado las jubilaciones. Unas bajas que han hecho que el coro haya pasado en poco más de una década de tener 120 cantantes a 66. Y con riesgo de que a final de esta temporada se quede con 61 voces antes nuevas jubilaciones.

La propuesta de los sindicatos, explica Javier Figueroa, presidente del Comité de Empresa INAEM-Teatro de UGT, es que el INAEM se comprometa a que la plantilla del coro esté formada por 93 voces “como recoge el Catálogo de puestos de trabajo del propio INAEM, con un presupuesto que no se ha ejecutado”. Para ello, han planteado un plan ejecutable en cuatro o cinco años para que salgan estas ofertas de empleo público de forma progresiva. Hoy son 27 plazas las que tendrían que cubrirse.

“El INAEM asegura que asumen las 93 plazas pero nos han dicho que el problema es que están maniatados por los recortes y quien tiene que decidir es Hacienda”, prosigue Figueroa. Por tanto, lo único que puede desbloquear las negociaciones es “un compromiso político verificado por el Ministerio de Hacienda de que se va a llegar a las 93 contrataciones”, añade. “No nos vale una carta más del director general del INAEM con buenas intenciones. Queremos un compromiso con un calendario de cómo se van a plantear las ofertas de empleo público que hay que cubrir”.

Estas 93 plazas, valora el bajo y miembro del Comité de Huelga Carlos García Parra, “es el mínimo para ofrecer un trabajo digno. Y seguro que el público lo va a notar”. Del mismo modo, garantiza que “ha habido un tímido acercamiento de posturas. El talante de la actual directora es radicalmente opuesto al del anterior [Miguel Ángel Recio]. Básicamente han mostrado intención. Antes ni los Cinco Lobitos”, remacha, para añadir que ya no hay más “autos de fe”. Ahora, es el turno de “firmas y un calendario tangible”.

También están encima de la mesa las contrataciones de cupo: las plazas interinas de cantantes de refuerzo para cada temporada y que, tal y como confirmó el INAEM a El Confidencial esta semana, están bloqueadas mientras estén abiertas las negociaciones. Si normalmente se contrataba cada temporada a nueve cantantes por periodo de un año, la propuesta, explica Figueroa, ha bajado a la mitad. “Proponen contratar a nueve pero seis meses”.

En cualquier caso, ese compromiso en forma de documento -que parece que el INAEM se daría prisa en tener listo según los sindicatos, aunque desde el instituto no han querido hacer declaraciones al respecto a este periódico- es la clave para desconvocar la huelga y que, entre otras cosas, no peligre la representación de este fin de semana de Revoluciones. Ciclo Sinfónica nº 4, en el que el Coro Nacional tendría que interpretar Alexander Nevsky de Sergei Prokofiev.