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Disney hace el agosto con su serie B
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estrenos de segunda categoría de la marca

Disney hace el agosto con su serie B

En un verano con el mundial de fútbol en medio y pocos estrenos potentes, Disney ha estrenado dos películas de segunda categoría más propias del DVD

Foto: Fotograma de 'Aviones: Equipo de rescate'
Fotograma de 'Aviones: Equipo de rescate'

“Disney, la fábrica de los sueños”. Así suelen referirse a la empresa para describir sus filmes y sus historias para toda la familia. Habría que reescribir esa frase para ser más realistas: “Disney, la fábrica de hacer dinero”, porque ante todo Disney busca el beneficio económico. Un beneficio que no tiene que estar reñido con la calidad de sus productos, aunque últimamente sea así.

Tras triunfar el año pasado en todo el mundo con Frozen (en Japón sigue siendo la tercera película más vista tras 16 semanas en cartel) la empresa vuelvea las andadas. De nada ha servido que la crítica se pusiera a sus pies con su vuelta a las princesas o que por fin consiguiera un Oscar que sólo lograba de la mano de Pixar. La todopoderosa compañía sólo piensa en el símbolo del dólar, y este año ha sacado dos subproductos que entran dentro de la serie B de Disney.

Una estrategia que siempre habían realizado, utilizar sus clásicos para sacar secuelas, spin-offs y otros derivados en los que la calidad dejaba bastante que desear.Eran los primos lejanos del filme original.

Para diferenciar sus dos facetas, Disney apostaba siempre por el mercado doméstico y sus canales propios de televisión para estos productos. Todos ellos éxitos de audiencia y ventas en DVD, pero sin que nadie los mezclara con sus grandes estrenos, para los que reservaba un desembarco en salas anunciado a bombo y platillo.

Viendo los resultados en televisión, ¿por qué no intentar explotar al máximo estos subproductos y darles un estreno en sala? Una política que el estudio sigue desde hace cuatro años y que ha tocado su techo este verano cuando dos películas de la serie B de Disney han coincidido en cartelera. El viernes pasado se estrenaba Aviones: Equipo de rescate, un filme que es: secuela, de un spin-off, de una película de Pixar, Cars.

Disney cogió el filme que más juguetes vendía y lo convirtió en saga. Tan evidente es la condición de Aviones de película de segunda categoría que ni siquiera se vende bajo el sello de Pixar, sino bajo el de Disney. La jugada no les salió mal. El primer filme tenía pensado su estreno directo al DVD y se lanzaron a las salas sin previo aviso el verano pasado. Lograron un éxito por el que nadie apostaba, 90 millones de dólares sólo en EEUU y otros 120 en el resto del mundo (1.765.000 de euros en su estreno español) para una película de 40 millones de presupuesto (ninguna de Pixar baja de los100). Había que correr para hacer la secuela.

En menos de un año han preparado otro filme con el que seguir explotando la gallina de los huevos de oro. Aviones: Equipo de rescate se ha colocado segunda en su estreno en España con 750.000 euros, y en EEUU en su primer fin de semana ha ingresado 17,5 millones de dólares. Un 21% menos que el primer filme, pero las cuentas siguen saliendo.

Campanilla, el hada del dinero

Hasta diciembre Disney no traerá su apuesta de calidad, 6 héroes, así que para preparar el terreno la casa ha decidido forrarse en verano con los restos. Además de Aviones: Equipo de rescate, hay otro filme de la productora en el top 5 de las películas más taquilleras de la semana pasada: Campanilla: hadas y piratas.Una película dedicada al personaje de Peter Pan, que se ha convertido en una de las musas del dinero veraniego para Disney.

Los filmes de Campanilla nunca han sido un taquillazo como lo fue Aviones, pero cuestan muy poco al estudio e internacionalmente funcionan muy bien en cines. En EEUU, por su parte, ni siquiera tienen un estreno en salas, sino que van directamente al mercado del DVD.

Hadas y Piratas es ya la quinta película sobre el personaje que produce Disney. Sólo las tres últimas han visto la luz en salas. La empresa vio el excelente funcionamiento en mercado doméstico y apostó por ellas en 2010 sacando poco más de 100 copias de Campanilla y el gran rescate. Hizo 2.200 euros por sala y un primer fin de semana de 225.000 euros, lo que unido a un gran mantenimiento la llevaron hasta 1.751.750 euros según datos del analista de taquilla Juan Herbera. La apuesta de sacar el filme en cines había salido bien.

Dos años después Disney no se lo pensó y fue a por todas, Campanilla y el secreto de las hadas llegó a 330 cines en noviembre, y en sus primeros tres días consiguió 813.000 euros. Al final de su carrera comercial más de 500.000 personas la habían visto,lo que supuso 3.529.953,06 para el estudio.

En esta última aventura Disney ha aprovechado el secarral que han sido las salas durante el mundial y ha conseguido que Campanilla: hadas y piratas se hiciera con el número uno de la taquilla la semana de su estreno. Eso sí, la crisis del cine ha hecho que sus cifras hayan sido peores que sus antecesoras. Aun así, más de 500.000 euros en sólo tres días y con todo el verano y pocos enemigos por delante para que Disney siga haciendo el agosto con sus productos de serie B.

“Disney, la fábrica de los sueños”. Así suelen referirse a la empresa para describir sus filmes y sus historias para toda la familia. Habría que reescribir esa frase para ser más realistas: “Disney, la fábrica de hacer dinero”, porque ante todo Disney busca el beneficio económico. Un beneficio que no tiene que estar reñido con la calidad de sus productos, aunque últimamente sea así.

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