San Sebastián 2016 entra en barrena

Donostia 2016 se tambalea. Tras confirmarse ayer la dimisión de la directora de la capitalidad cultural, Itziar Nogueras, el ministerio de Educación y Cultura cargó contra el proyecto: la "nueva crisis institucional" "pone de manifiesto la falta de profesionalidad de su dirección tanto en la gestión como en su compromiso".

Todos estos aspectos "afectan a la viabilidad del proyecto de Donostia-San Sebastián, Capital Europea de la Cultura 2016", sentenció el ministerio Cultura.

Cultura manifestó a su vez que "informará próximamente a las autoridades europeas" de la situación que atraviesa la Capitalidad, "así como de su preocupación por la falta de lealtad institucional, los retrasos en la ejecución del proyecto y la falta de transparencia en la relación entre la directiva y los miembros de su patronato".

El comunicado de Cultura agudizó la crisis abierta el martes tras amagar Itziar Nogeras con su dimisión. En un principio, las instituciones que impulsan la Capitalidad (Ayuntamiento de San Sebastián, Diputación, Gobierno Vasco y ministerio de Cultura) pidieron a Nogeras que se tomara 24 horas para recapacitar.

No obstante, ayer por la mañana, la junta de portavoces del Ayuntamiento de San Sebastián acordó, con el apoyo de Bildu, pedir la marcha de Nogeras, que se oficializó poco después.

El alcalde de San Sebastián, Juan Carlos Izagirre (Bildu), reconoció que Donostia 2016 está ante "una nueva crisis" y que el "reto" está ahora en dar "estabilidad" al proyecto.

El alcalde de San Sebastián reconoció no haber dado suficiente estabilidad a la oficina de la Capitalidad

Izagirre, en un encuentro con periodistas, hizo "autocrítica" como presidente de la Fundación 2016 y admitió que "no se ha acertado" en dar "estabilidad" a la oficina de la CapitalidadEuropea de la Cultura, ni en su política de comunicación, ni tampoco en "la transparencia" que esta debe tener.

El alcaldeno desveló las razones de la dimisión de Nogeras, pero admitió que la gestora le expuso el martes algunas quejas, como la "sensación de falta de confianza" y la escasez de personal.

Los partidos de la oposición en el Ayuntamiento donostiarra -PSE, PP y PNV- criticaron la gestión de la crisis en la Junta de Portavoces. "No le estaban dejando gestionar, no se le estaba dando la dotación económica y de personal que pedía y no se sentía respaldada y apoyada", indicó el portavoz popular, Ramón Gómez.

El edil del PP solicitó también la dimisión de Izagirre "por su incapacidad manifiesta en la gestión del principal proyecto que tiene esta ciudad en toda su historia".

El portavoz del PSE, Ernesto Gasco, cree que Donostia 2016 está en "una crisis muy profunda, global" tras el anuncio de Nogeras, a la que ha llamado "directora chantajista".

"Por desgracia, se ha demostrado que cuando se politizan nombramientos los proyectos no salen adelante. Lamento que el tiempo nos haya dado la razón", ha recalcado Gasco, que ha reclamado el acuerdo de todos los partidos para "despolitizar" la Capitalidad Cultural.