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La censura japonesa ataca al manga juvenil
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'gen, el descalzo', prohibido en los colegios

La censura japonesa ataca al manga juvenil

La Junta Educativa de la ciudad de Matsue ha retirado la obra de Keiji Nakazawa por su explicitud a la hora de retratar la bomba de Hiroshima

Foto: Imagen de 'Gen, el descalzo'
Imagen de 'Gen, el descalzo'

Los casos de censura al mundo del arte siguen siendo, por desgracia, bastante habituales. De hecho no es la primera vez que en Japón prohíben el contenido de obras artísticas por su contenido sexual o violento. En 2010 se aprobó una ley que impedía que los mangas utilizaran personajes de apariencia infantil en actitudes eróticas. Medidacontra la que muchos de los creadores de este tipo de cómic tan popular se manifestaron abiertamente.

Ahora le ha tocado el turno a Hadashi No Gen (Gen el descalzo), de Keiji Nakazawa, un manga que se comenzó a publicar en 1973 y que narra la historia de Gen y su madre, que viven la explosión de la bomba atómica de Hiroshima y tienen que sobrevivir en una tierra devastada. Esta publicación tuvo muchísimo éxito y se recopiló en diez volúmenes que se han ido reeditando constantemente ya que están considerados como una obra de gran valor por cómo transmite la barbarie de la guerra a los jóvenes.

Imagen de 'gen, el descalzo'Pues bien, la Junta Educativa de la ciudad de Matsue, en el suroeste de Japón, ha retirado de las bibliotecas y de los colegios Gen, el descalzo, para restringir su acceso a los jóvenes, ya que creen que la violencia que muestra la obra es excesiva para ellos. El cómic expone gráficamente las consecuencias que tuvoen la gente la bomba de Hiroshima, pero también las barbaridades cometidas por el ejército japonés durante esa época, como la Violación de Nanking, en donde los soldados violaron y ejecutaron a prisioneros de guerra y civiles. El suceso más infame fue el concurso por ver quién era el primero en matar a cien ciudadanos chinos. Esto ha hecho que el libro haya sido acusado en varias ocasiones por los revisionistasque consideran que dichos acontecimientos nunca ocurrieron.

Sin embargo, todas estas situacionesfueron conocidas por el autor de primera mano, ya que se basa en sus propias experiencias y las de su madre (su padre y sus hermanos murieron durante el bombardeo). De hecho la viuda de Nakazawa, que perdió a su marido en el 2010 por un cáncer de pulmón, siempre ha manifestado quelas situaciones violentas están suavizadas para que puedan ser toleradas por un lector más joven, puesto que la realidad fue mucho más dura de lo que se veen sus páginas.

El cómic también supone una críticacontra el último emperadorHirohito, que gobernó el país desde 1926 hasta 1989, y en cuyo nombre Japón luchó en la Segunda Guerra Mundial.

Muchos partidarios de esta publicaciónse han mostrado en desacuerdo con estas restricciones tomadas por la Junta Educativa, como también lo han hecho 44 de los 48 directores de escuelas de Matsue encuestados por el periódico The Japan Times. Este descontento popular ha provocado que la Junta Educativa vaya a volver a reunirse para reconsiderar su polémica resolución.

Una decisión que choca radicalmente con las medidas tomadas por otra Junta de Educación, en este caso la de Hiroshima, que en 2012 anunció que este mismo manga, Gen, el descalzo, se iba a incluir dentro del programa de educación del tercer año de primaria. Con ello, pretendían poder transmitir a la actual generación lo que las personas sentían en dicho periodo histórico que conmocionó a Japón.

Habrá que esperar para ver si finalmente dan marcha atrás en esta decisión que ha hecho que una de las publicaciones japonesasmás populares, con una adaptación animada y otra en película de acción real, se vea relegada a ser usada sólo por adultos. Un golpe a este canto antibelicista y a la memoria del propio autor, que antes de fallecer declaraba cuál era el propósito detrás de su publicación, “las armas atómicas son espantosas, tengo que hacer todo lo posible para que la Tierra se deshaga de ellas”.

Los casos de censura al mundo del arte siguen siendo, por desgracia, bastante habituales. De hecho no es la primera vez que en Japón prohíben el contenido de obras artísticas por su contenido sexual o violento. En 2010 se aprobó una ley que impedía que los mangas utilizaran personajes de apariencia infantil en actitudes eróticas. Medidacontra la que muchos de los creadores de este tipo de cómic tan popular se manifestaron abiertamente.

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