Urbano Cairo, el millonario discípulo de Berlusconi que quiere entrar en 'El Mundo'

Muchas similitudes y nexos se entrecruzan en la trayectoria de Silvio Berlusconi y Urbano Cairo, uno de los hombres más ricos de Italia y el empresario que ha puesto ahora en su diana el control mayoritario del grupo RCS, la corporación mediática que controla, entre otros periódicos, 'El Mundo', 'Marca' o 'Expansión'. Al igual que el 'expremier' italiano, Cairo controla un equipo de fútbol -modesto, eso sí- (el Torino), una cadena de televisión que compite directamente con el imperio de Mediaset en el país transalpino (La 7) y un grupo de comunicación cuyo principal baluarte es la venta de espacios publicitarios. Un desconocido en nuestro país que, si prospera en sus planes, puede hacerse con los negocios de Unidad Editorial y los dominios de Antonio Fernández Galiano.

El nombre de Urbano Cairo saltó a los titulares de la prensa italiana a última hora del pasado viernes, tras anunciar por sorpresa una opa sobre la mayoría de RCS, en donde ya figura como uno de los socios minoritarios (posee un 4,61%). "La nuestra es una operación de mercado, no una opa hostil”, explicó ayer Cairo a Radio Anch'io. “Queremos mantener dentro [de RCS] a los viejos socios para que se beneficien conmigo de los eventuales ingresos de RCS una vez que sea reestructurada”.

La apuesta ha calentado la acción. Desde el jueves, los títulos de la dueña de 'El Mundo' se han disparado en la Bolsa de Milán un 44% y cerraron ayer con un rebote del 28,79%. Un veredicto de los mercados que no tiene por qué ser, eso sí, el que suscriban los accionistas históricos de 'Il Corrierre della Sera' o 'La Gazzetta dello Sport', es decir, los Agnelli y compañía.

Especialista en venta de publicidad

Nacido en 1957 en Masio, en la provincia de Alessandria, en cuanto Cairo se graduó en la universidad fue derecho a las puertas de Berlusconi a ofrecer sus servicios dentro del coloso Fininvest, y en poco tiempo se convirtió en uno de sus hombres de confianza. Fue director comercial y vicedirector de Publitalia'80 (distribuidor exclusivo de la publicidad de Mediaset en Italia) y, después, entre 1991 y 1995, hasta su despido, director general de Arnaldo Mondadori Editore. Con su salida se rompen sus buenas relaciones con Berlusconi, convertido ahora, con el paso del tiempo, en uno de sus competidores. Sin embargo, llegó a ser uno de los invitados a su boda, en la que Cairo le regaló a la novia un retrato firmado por la artista Lila de Nobili.

Con la experiencia adquirida en Fininvest, Cairo puso en marcha, en 1996, su propia empresa dedicada a la venta de espacios publicitarios. Uno de sus primeros clientes fue, de hecho, la propia RCS con las concesiones en exclusiva de títulos como la revista 'Io Donna', 'Oggy' o 'TV Sette'. En 2013, entraría de puntillas en RCS recordando, precisamente, aquellos inicios en solitario. Por el camino, y a base de compras como la editorial Giorgio Mondadori o la cadena de televisión La 7, Cairo ha logrado crear un grupo que en 2014 facturó 277,6 millones de euros y arrojó un ebitda de 28,18 millones. Un grupo pequeñito en comparación con el gigante Mediaset, pero que maneja cifras similares a las de Unidad Editorial en España (330 millones de facturación en 2015). La lista de hitos comparables a Berlusconi se acentúa en 2005 cuando Cairo adquiere el Torino F.C., que estaba entonces al borde de la quiebra.

Oposición de los históricos

Pero sus planes para hacerse con el control de RCS podrían chocar con los intereses de los accionistas históricos de la casa (Mediobanca, Diego Della Valle, UnipolSai y Pirelli), tal y como apuntan diarios italianos como 'Il Sole 24 Ore'. Estos no estarían dispuestos a aceptar la valoración económica hecha por Cairo, pero sí podrían considerar un plan alternativo con el fin de empujarle a aumentar su oferta.

Cairo explicó ayer en la radio el porqué de su estimación. “Hemos valorado RCS en 770 millones de euros que, si quitamos los 90 millones de la venta de RCS Libros [al grupo editorial Mondadori] son casi 700 millones, el doble de lo que capitaliza en bolsa el Grupo L'Espresso”.

En un comunicado difundido el pasado viernes, Cairo subrayó su intención de "crear un gran grupo editorial multimedia" a partir del control de RCS, que arrastra desde hace años graves dificultades financieras. La unión “permitiría crear un grupo diversificado que, haciendo hincapié en la elevada calidad de sus propios productos editoriales y de las noticias, periódicos, deporte y televisión, pueda posicionarse como operador de referencia en el mercado italiano”.

Entre las condiciones que se mencionan para el éxito de la opa, destaca que los bancos no podrán valerse del receso de las financiaciones ni tampoco podrán solicitar concursos de acreedores para RCS y tendrán que mantener las líneas de financiación existentes. Además, los bancos financiadores deben comprometerse a renunciar a la facultad de pedir el reembolso anticipado de la deuda a causa del cambio de control.