Sánchez se pone de perfil y deja que sea el PP quien decida el futuro de Buruaga

El programa de debate ideado por Ernesto Sáenz de Buruaga para Televisión Española (TVE) sufre un considerable retraso que ni en la propia Corporación pública ni en la productora encargada de su realización, Pulso –perteneciente al Grupo Secuoya–, son capaces de explicar. Según los planes iniciales, España Opinadebía haberse puesto en antena el pasado 14 de marzo y haberse estrenado en la recta final de las elecciones andaluzas. Pero la división interna dentro del bloque que forman los propios vocales del PP en el Consejo de Administración de RTVE ha metido el espacio en la nevera de la tele sine die.

El presidente de RTVE, José Antonio Sánchez, parece haberse lavado las manos en este asunto hasta que los propios vocales del PP aclaren el futuro del presentador. Si sorprendente fue que no saliera aprobado en la reunión del órgano de gobierno de RTVE del 24 de febrero, más sorpresa ha generado dentro de la propia RTVE que este asunto no recibiera el visto bueno definitivo en la reunión del pasado 24 de marzo. Sánchez ya anunció previamente, en su última comparecencia en el Senado, que él no iba a incluir ese punto en el orden del día,pero dejaba la puerta abierta a que una mayoría cualificada del Consejo –dominado por el PP–lo incluyera a última hora. En las últimas semanas, el consejero de CIU, Oscar Pierre, había manifestado internamente su deseo de que se volviera a repetir la votación ese día pero, finalmente, no hubo ningún movimiento ni por su parte ni por la de los vocales elegidos por el PP.

En este escenario, el desembarco definitivo de Buruaga en la parrilla de TVE es una incógnita que, si finalmente se resuelve, llegaría ya muy ajustada en el tiempo a las elecciones autonómicas y locales de mayo. El Consejo de Administración no tiene previsto volver a reunirse hasta el próximo 30 de abril y, en todo caso, aplazaría su estreno para mediados de mayo y con el verano a la vuelta de la esquina. Por el camino, Buruaga ha visto como la televisión pública sí ha dado su visto bueno a otros proyectos como La alfombra roja, de José Luis Moreno, o al próximo programa de entrevistas de Bertín Osborne –En tu casa o en la mía–.

Sánchez se ha puesto de perfil en este asunto a la espera de que sean los propios consejeros que se abstuvieron en la votación de febrero los que resuelvan la papeleta de España Opina, un programa que la productora presentó a TVE el año pasado y que gustó a los directivos de la cadena desde un principio. Según explicó Sánchez en el Senado, RTVE tiene desde el 17 de marzo un informe elaborado por los propios servicios jurídicos de la Casa, que avalan la viabilidad del programa y su encaje dentro del mandato-marco que rige la Corporación.

“Dicho informe considera, por una parte, que el Programa España Opinano tiene por qué calificarse como programa informativo en sentido estricto –explicó Sánchez– y, por otra, que, aunque lo fuera, concurren en este caso las condiciones exigidas para que la contratación propuesta sea ajustada a la Ley 17/2006, del mandato-marco, y al segundo convenio colectivo”.

El informe vendría a eliminar las dudas expresadas por los consejeros Fernando Navarrete, María Luisa Ciriza y Rosario López Miralles, que son los que tienen la llave del programa, y despejaría el camino para que el asunto no acabe recurrido en los tribunales por los consejeros que más rotundamente se oponen al programa, la de IU –Teresa Aranguren–y el del PSOE –Miguel Ángel Sacaluga–. Según la propuesta remitida por Secuoya, cada programa de España Opina tendría un coste de 60.000 euros para TVE, por debajo del precio pactado para el programa de Bertín Osborne (70.000 euros). Sea como fuere, hasta el 30 de abril no habrá nuevas noticias sobre el futuro de Buruaga. Si a la tercera no va la vencida, España Opinase quedará, eso sí, en el baúl de los proyectos desechados.