El fundador de 'Wikileaks', ¿acosador o víctima de un complot?

El portal web Wikileaks sigue dando que hablar, no sólo con los documentos que publica (este miércoles ha sacado a la luz más de mil documentos bajo secreto de sumario del asesino y pederasta belga Marc Dutroux) si no por la investigación que se ha abierto a su fundador, el australiano Julian Assange, por un posible caso de acoso.

La Fiscalía sueca decretó este miércoles el inicio de una investigación preliminar por el supuesto acoso que Assange habría ejercido sobre una mujer cuyo testimonio ha desencadenado un extraño y oscuro proceso judicial. En un principio, ésta y otra mujer acudieron a la policía y acusaron a  Assange de violación y agresión respectivamente, aunque ninguna de ellas presentó una denuncia formal. Aun así, ante la gravedad de los hechos y la posibilidad de que Assange abandonara el país, la fiscal de guardia, Maria Häljebo Kjellstrand, decidió decretar una orden de captura contra él.

Mientras la policía buscaba a Assange, que se encuentra de vacaciones en el norte de Suecia pero en un punto sin determinar, se hizo cargo del caso la fiscal general Eva Finné, quien sólo 12 horas después de que se decretara la captura canceló esta orden y ordenó archivar una de las dos denuncias (la de violación) alegando que contaba con más información que la juez de guardia, sin especificar más datos.

En un comunicado difundido por la Fiscalía sueca, Finné reiteró que no hay fundamento para un caso de violación y concluyó, además, que tampoco hay indicios de ningún otro acto punible. Aun así Assange será interrogado, aunque ha negado los hechos e incluso ha insinuado que estas denuncias pueden formar parte de una campaña de desacreditación del portal. Hace sólo un par de días Assange aseguraba que ya le habían puesto "en guardia contra trampas sexuales". "No sé quién se esconde detrás, pero nos avisaron de que, por ejemplo, el Pentágono, jugaría sucio para destruirnos", afirmaba Assange en una entrevista con el diario Aftonbladet de Estocolmo. En la red la palabra “complot” también sube como la espuma en los foros que hacen referencia al tema de las agresiones supuestamente cometidas por Assange.

El abogado de las dos denunciantes, Claes Borgström, se ha mostrado muy crítico con la Fiscalía y ha anunciado la presentación de un recurso contra la decisión de la fiscal, mientras que el defensor de Assange, Leif Silbersky, ha hablado de "escándalo" por mantener los cargos contra su cliente y ha atacado a la fiscal de guardia que decidió emitir la orden de captura.

Gira de conferencias por Suecia

El proceder de la Fiscalía en el caso Assange ha atraído la atención internacional y ha desencadenado duras críticas de juristas suecos por la falta de explicaciones sobre los motivos para retirar en un día una orden de captura por supuesta violación. La Organización por el Estado de Derecho ha presentado, por su parte, una denuncia ante el Defensor del Pueblo en el área judicial contra la fiscal de guardia.

Los hechos denunciados se produjeron supuestamente hace más de una semana, coincidiendo con la gira de conferencias que Assange realizaba por Suecia, invitado entre otros por el Partido Pirata sueco, organización a favor del libre intercambio de archivos en la red que servirá de soporte para los servidores de Wikileaks pese a la polémica.

Una de las denunciantes declaró hace unos días bajo anonimato al diario sueco Aftonbladet que había sido contactada por otra mujer, a la que no conocía y quien dijo que había sido violada por Assange, y que, tras contrastar sus historias, decidieron presentar sendas denuncias. En ambos casos se trató de episodios de sexo consentido que se produjeron en días distintos y que luego acabaron en abuso con "un hombre con una visión equivocada de las mujeres y problemas para aceptar un no", dijo la denunciante.

Assange, además de defender su inocencia e insinuar que se trata de un complot contra su persona o contra el portal Wikileaks, ha anunciado que sus abogados estudian presentar varias querellas, una de ellas contra el diario Expressen, el primero que difundió la noticia de las agresiones en su edición electrónica con una gran foto suya y la confirmación del fiscal de turno.