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La prensa pedirá al Gobierno ser un sector en reconversión como los astilleros en los 80
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UN INFORME ELABORADO POR SAGARDOY JUSTIFICARÍA DRÁSTICOS AJUSTES LABORALES

La prensa pedirá al Gobierno ser un sector en reconversión como los astilleros en los 80

Como la minería, la siderurgia o los astilleros durante la dura reconversión industrial que tuvo lugar en España durante los años 80. Los grandes editores de

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La prensa pedirá al Gobierno ser un sector en reconversión como los astilleros en los 80

Como la minería, la siderurgia o los astilleros durante la dura reconversión industrial que tuvo lugar en España durante los años 80. Los grandes editores de periódicos contemplan pedir al Gobierno que la prensa sea considerada un sector en reconversión, un estatus que avalaría los ajustes laborales que piden para sus redacciones. La demanda está justificada en un informe que la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE) solicitó a Sagardoy Abogados, una de las principales referencias en derecho laboral en España y que refrenda que la crisis que atraviesa la prensa es comparable en cifras a la que su día acometió la industria pesada.

 

En el documento, que ya obra en poder del presidente de AEDE, Antonio Fernández-Galiano, se plantean las medidas laborales específicas que podría acoger un plan de reconversión. De hecho, muchas de ellas ya se están incorporando con mayor o menor cobertura en los medios. Por ejemplo, se apunta la necesidad de reducir los costes laborales de las empresas periodísticas mediante un modelo de doble escala salarial, por el que las nuevas contrataciones puedan realizarse en condiciones distintas –y menos ventajosas- de las que tienen los más veteranos, acogidos a convenios colectivos de largo alcance.

Además, el informe plantea todo un abanico de medidas denominadas de transición laboral, propias de un sector en reconversión. Así, se aboga por facilitar las jubilaciones anticipadas, que podrían estar subsidiadas incluso por un fondo estatal. También se considera clave dotar de mayor flexibilidad a la negociación colectiva. “La idea es proporcionar a las compañías periodísticas mayor margen de actuación e incluso que puedan funcionar por objetivos. Lógicamente, en ningún momento se plantea que nadie pueda perder derechos que ya tiene adquiridos”, aseguran a este diario fuentes conocedoras del informe.

Fernández Galiano esgrimió la existencia de este documento en la junta directiva de la asociación celebrada en febrero. Sobre la mesa estaba también la propuesta de apoyo al sector en que trabajan los editores. ¿Objetivo? Hacérsela llegar lo antes posible a la vicepresidenta De la Vega, que comanda el plan de ayudas a la prensa. El Ejecutivo pidió a finales de diciembre a Fernández-Galiano, a la sazón consejero delegado de Unidad Editorial, un documento de partida que incluyera una batería de iniciativas; se debatirían en dos mesas, una técnica y otra de corte más político. El Gobierno quiere cerrar el plan durante el semestre de presidencia española de la UE.

 

Hacia redacciones más baratas

El documento manejado por AEDE, cuyo contenido adelantó El Confidencial, contenía toda una colección de propuestas laborales que cobran nueva luz a partir del informe Sagardoy. “Todos los grupos editores de prensa se han visto abocados a procesos individuales de reestructuración. Dado que las causas que motivan la crisis son generales y, por tanto, afectan por igual a todas las empresas del sector, las medidas necesarias para reconducir la situación han de ser aplicables a escala sectorial”, rezaba el texto. En esta línea, añadía que “los convenios en vigor son rígidos y no permiten acometer individualmente los cambios necesarios”.

Al final, lo que los editores piensan y aseguran sotto voce a quien quiere oírles es que sus plantillas son demasiado caras. Y entre las medidas concretas que estudian plantear al Gobierno para abaratarlas destaca “el acceso directo a un sistema de jubilación anticipada” y, de forma un tanto ambigüa, “la inclusión de mecanismos a disposición del editor para modificar, suspender o extinguir la relación laboral bajo ciertos supuestos predefinidos”. ¿Despidos más baratos en el marco de una reconversión industrial? “Puede, aunque ese trabajo de ajuste se hizo el año pasado”, aseguran fuentes del sector. Según datos de la Federación de Asociaciones de Periodistas de España (FAPE), en 2009 se perdieron más de 3.000 empleos..

En esa línea, también hay interés entre los editores por reorganizar las redacciones en torno a un profesional  “multisoporte, que posibilite el mantenimiento de la retribución o del propio puesto de trabajo”. En roman paladino, que el periodista cubra más campos -el papel, Internet o hasta el entorno gráfico-, primer paso para adelgazar las plantillas. Para ello resulta imprescindible “la reformulación de la organización profesional”, a través de una redefinición de grupos y categorías, del fomento de la movilidad interna y la adecuación de la jornada laboral a los nuevos procesos, apunta el borrador que maneja AEDE.

Sí se pueden aligerar costes de forma directa con “una definición exhaustiva de aquellas actividades que pueden ser realizadas por profesionales independientes, cuya relación jurídica con el editor no pueda ser interpretada como laboral por cuenta ajena”. La cuestión no es baladí. Una sentencia obligaba recientemente a El Mundo a integrar en su plantilla a ocho fotógrafos que ejercían como colaboradores fijos del medio desde hacía entre 9 y 19 años sin que hubiera una relación mercantil de por medio.

Más dinero en publicidad institucional

Resulta igualmente llamativo que los editores vayan a pedir a De la Vega que la Administración “incremente la inversión publicitaria institucional en la prensa a niveles del año 2007 para los próximos tres años”, lo que supondría triplicarla en plena cruzada del Gobierno para recortar el gasto público. Los números que anticipan los grandes grupos de prensa explican esa demanda. “Aunque las cifras no son públicas, se podría estimar que tras añadir las amortizaciones, resultados financieros e impuestos, el resultado neto agregado de los tres mayores grupos de prensa en España sería negativo en un importe muy considerable”, constata el informe en referencia a los resultados de 2009.

Hasta septiembre, el beneficio bruto de explotación conjunto de Prisa, Vocento y Unidad Editorial fue de 14 millones, muy lejos de los 200 millones que obtuvieron hasta septiembre de 2007 y de los 68 del mismo periodo del año anterior. Las primeras cifras del conjunto del año no invitan al optimismo. Sin ir más lejos, ABC se dejó casi 57 millones el pasado año, incluido el ERE. Del mismo modo, las ventas de ejemplares bajaron un 1% en 2008 y la caída se aceleró hasta el 3% en 2009. ¿El principio del fin? "El riesgo de que la difusión pueda descender a niveles de hace 20 años empieza a materializarse", admite la AEDE en su propuesta de ayudas al sector.

Como la minería, la siderurgia o los astilleros durante la dura reconversión industrial que tuvo lugar en España durante los años 80. Los grandes editores de periódicos contemplan pedir al Gobierno que la prensa sea considerada un sector en reconversión, un estatus que avalaría los ajustes laborales que piden para sus redacciones. La demanda está justificada en un informe que la Asociación de Editores de Diarios Españoles (AEDE) solicitó a Sagardoy Abogados, una de las principales referencias en derecho laboral en España y que refrenda que la crisis que atraviesa la prensa es comparable en cifras a la que su día acometió la industria pesada.

AMI (Asociación de Medios Informativos)