Ganar dinero en Youtube ya es posible

A Google le ha costado más de cuatro años idear la fórmula con la que rentabilizar su inversión en el portal de vídeos Youtube, pero una vez conseguido hasta el usuario va a sacar tajada.  Google anunció ayer que compartirá parte de sus ingresos por publicidad con los que cuelguen los contenidos más populares. El criterio será el número de visitas y la asiduidad con la que los usuarios suban los vídeos.

Hace dos meses comenzaron las primeras pruebas de anuncios insertados en los vídeos. La fórmula elegida finalmente resultó ser la de un faldón de texto sobre los vídeos, en lugar de otro vídeo publicitario reproducido previamente. Al pinchar, el enlace lleva hasta otro vídeo dentro del portal que contiene el mensaje comercial en sí.

El método por el cual los usuarios podrán lucrarse con sus vídeos es similar al funcionamiento da AdSense, la publicidad para webs de Google, que inserta anuncios automáticamente sin necesidad de hacer adminstraciones comerciales. Esta aventura comercial ha comenzado en EEUU con un grupo de usuarios escogidos por la popularidad de sus vídeos aunque, según explicó Google en su blog oficial, “aceptarán peticiones de usuarios que creen contenido original con asiduidad, sean dueños de los derechos de autor y generen una audiencia importante en Youtube”.

Según sus gestores, es el último paso para mejorar la capacidad de YouTube de hacer dinero con los miles vídeos subidos cada día. La incapacidad de rentabilizar económicamente su enorme popularidad es una de las críticas de los accionistas al portal que Google compró en 2006 por 1.650 millones de dólares. El grupo inversor Goldman Sachs estima que YouTube registrará este año unos ingresos de 300 millones de dólares. Además, analistas de Credit Suise creen que YouTube podría perder casi 500 millones de dólares este año.

El precio de un gran logro

El vídeo es uno de los tipos de fichero más “pesados” (que más ocupan), mucho más que las imágenes estáticas y por supuesto muchísimo más que el texto plano, y siempre ha sido complicado almacenarlos en discos, CD’s, etc. Más difícil aún es transmitirlos en tiempo real por una red, ya que si con las antiguas conexiones a Internet, una página web compuesta sólo por texto e imágenes tardaba en cargar, compartir vídeos en tiempo real era impensable.

La compresión de datos consiste en eliminar de un archivo datos sobrantes o redundantes, con la intención de hacer el fichero más ligero y más fácil de distribuir. Para ello se emplean diferentes algoritmos que extraen los datos más innecesarios o los que más se repiten y los codifican de forma que ocupen menos. Aunque suena fácil en realidad no lo es, y encontrar algoritmos cada vez más eficaces es un trabajo muy duro. El logro de YouTube es encontrar una manera de comprimir los videos tan eficaz que hizo posible la distribución de vídeos en streaming (en tiempo real) a través de las lentas conexiones de Internet. El último logro era conseguir que esto fuera rentable.