La fórmula perfecta para desayunar (no tomes nunca café)

Muchas personas siguen pensando que es la comida más importante del día, aunque algunos están seguros de que tampoco pasaría nada si nos lo saltáramos y no rompiéramos el ayuno hasta un poco más tarde. Pero nadie duda que la elección correcta de estas primeras comidas tras el descanso nocturno son esenciales para cuidar la figura. Es ahora cuando los expertos han descubierto que lo que quizá se está haciendo mal sea ese tipo de comida que elegimos a la hora de desayunar.

Esta investigación, realizada por la Universidad de Oxford, sugiere que no debemos tomar cereales en un recipiente redondo, y que lo mejor es ponerse de pie en vez de sentarse cuando se trata de la primera ingesta del día. Además, nunca se debe empezar la mañana con una taza de café.

Desayunar sentado contribuye a elevar las probabilidades de diabetes, enfermedades cardíacas y muerte prematura

Jennifer Newton, especialista en Neurociencia y directora del proyecto, sostiene que comer cereales en un recipiente cuadrado te hará sentir más saciado ya que dismuye la percepción de hambre del cerebro.

La doctora descubrió también que evitar el café con cereales y comer mientras se está de pie hacía que las personas sintieran que su comida fuera más nutritiva. Estar centrados en el desayuno, sin distraerse con la televisión o el móvil, también ayudó a los participantes a tener un mejor desayuno.

Comer con los ojos

Estos resultados fueron obtenidos gracias a un experimento de dos días de duración con 78 mujeres para saber de qué forma desayunaban las participantes y de qué manera se quedaban más saciadas y con más energía. Según la doctora Newton: "Los participantes que consumieron cereales en un tazón redondo pensaron que su comida era menos nutritiva que los que lo hicieron en un recipiente cuadrado". Las entrevistas realizadas con las mujeres participantes sugirieron que muchos de nosotros comemos con los ojos, ya que el cereal parecía más apetecible y nutritivo en un recipiente de cuatro lados.

La doctora agregó que "más que nunca la gente está comiendo 'sobre la marcha" y aseguró que comer de pie aumenta el pensamiento de que el cereal es mucho más sano.

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A. López

Por otro lado, un estudio británico afirma que se gastan unas 50 calorías más comiendo de pie que sentado, algo que contribuiría a mantener la línea, pero otro apunta a que, si comemos de esta forma, lo hacemos rápido y tenemos la sensación de comer menos, lo que nos "autoriza" más tarde a darnos un atracón.

Un estudio de la Universidad de Harvard señala que permanecer mucho tiempo sentado (trabajar en una oficina, no desayunar de pie, volver en metro e ir sentado o ver la tele en el sofá), contribuye a elevar las probabilidades de diabetes, enfermedades cardíacas y muerte prematura. No que lo provoquen, sino que abusar de esta postura, puede conducir a ello.