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7 alimentos que debes dejar de comer para adelgazar en dos días
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régimen express para un evento especial

7 alimentos que debes dejar de comer para adelgazar en dos días

El modelito que te compraste de pronto no te cabe ni con vaselina y no sabes qué hacer. Te lo tienes que poner en menos de 3 días. No te preocupes: aquí tienes una dieta de choque

Foto: Cuidado con las verduras y el pan, te hinchan como un globo. (iStock)
Cuidado con las verduras y el pan, te hinchan como un globo. (iStock)

Tienes un evento importante en un par de días y estás hinchado. El modelito que te compraste de pronto no te cabe ni con vaselina. No sabes qué hacer. Te sobran unos 3 kilos que no sabes muy bien de dónde han salido. Piensas en ponerte a correr como loco por el parque que está al lado de tu casa, o en dejar de comer hasta el día del evento. Pero, amigo, no es una opción sensata, ni mucho menos.

Para deshincharte rápido solo debes dejar de comer ciertos alimentos. No perderás mucha grasa, pero sí líquidos, lo que te hará parecer mucho más delgado. Visiblemente, parecerá que has bajado entre dos y tres kilos. Y la ropa aquella que te compraste te quedará como un guante.

Aunque algunos alimentos frescos son esenciales dentro de una dieta saludable, hay algunos que te hinchan. Es el caso de las verduras crudas

"La hinchazón temporal se puede aliviar en pocos días con la hidratación adecuada y eligiendo bien los alimentos", asegura la nutricionista Jennifer Christman a 'Prevention'. Olvídate de tés de desintoxicación, pastillas, zumos de limón o trucos extraños innecesarios. Si dejas de comer por unos días estos siete alimentos, bajarás peso en tiempo express sin poner en riesgo tu salud.

1) Verduras crudas

Aunque algunos alimentos frescos son esenciales dentro de una dieta saludable, hay algunos que te hinchan como un globo. Es el caso de las verduras crudas. Si te sientes hinchado y quieres verte más slim, deberías cocinar los vegetales antes de comerlos. El aporte nutricional será el mismo, pero la versión cocinada ocupará menos espacio en tu tracto gastrointestinal, el conjunto de órganos responsable de la digestión de los alimentos. Y, por tanto, no te inflarás.

Así pues, debes dejar ya de comer y cenar ensalada. Es muy sana, pero no es la opción que más te conviene ahora mismo. Aunque parezca mentira, la lechuga es un alimento bastante indigesto. Tiene un alto contenido en fibra insoluble y puede hacer que tengamos gases e hinchazón abdominal por la noche. Mucha gente toma ensaladas por la noche, y no hay razón para no hacerlo, pero es preferible apostar por ensaladas de tomate o camperas. También son recomendables las ensaladas mixtas, con algo de proteína, que ayudarán a saciarnos y no tener la tentación de picar por la noche.

2) Comida picante

Aunque el picante es un gran saciente y puede ser un poderoso quemagrasas, a corto plazo no hace bien a tu figura. "Los aliments picantes pueden liberar el ácido del estómago, lo que causará irritación, gases e hinchazón", asegura Alpert. La lista de preparados prohibidos para tu régimen express son la pimienta negra, la nuez moscada, el chile en polvo, la cebolla, el ajo, la mostaza, la salsa barbacoa, el rábano picante, el ketchup, la salsa de tomate y el vinagre. En su lugar, es mejor que optes por condimentar tu comida con limón fresco o zumo de lima.

La sal retiene líquidos, lo que acaba inflándote. Para adelgazar en tiempo récord, debes limitar tu ingesta de sodio a una cucharadita o menos al día

La comida picante, no obstante, es un gran aliado a la hora de adelgazar a largo plazo. Según una reciente investigación realizada en la Escuela de Farmacia de la Universidad de Wyoming, Estados Unidos, los alimentos que contienen chile picante pueden ayudarnos a quemar grasas sin tener que restringir las calorías de nuestra dieta. Otro estudio realizado en 2013 en la Universidad de Maastricht (Países Bajos) demostró que el chile, la cayena o los pimientos rojos picantes contienen capsaicina, el componente activo que disminuye los lípidos corporales mediante un mecanismo que motiva la muerte de las células grasas inmaduras, por lo que podría ayudar a adelgazar a largo plazo.

3) Sal

La sal retiene líquidos, lo que te hace estar más hinchado que de costumbre. Para adelgazar en tiempo récord, debes limitar tu ingesta de sodio a una cucharadita o menos al día. Eso debería ayudarte a bajar tu peso en agua rápìdamente.

Debes recordar que el sodio es el responsable de la retención de agua y de la hinchazón el cuerpo, ya que hidrata a las células. Una dieta saludable debe contener solo 2.300 mg (una cucharadita) de sodio por día. Asimismo, es recomendable que evites alimentos muy salados, como salazones, embutidos, salsas, aderezos, palomitas y algunos quesos (especialmente el roquefort).

No tienes que reducir en exceso el consumo de sal, ya que es un elemento químico necesario para el mecanismo del cuerpo humano, utilizado para producir energía y regular la hidratación, y es un ingrediente que no puede faltar en la preparación de los alimentos de cualquier cocina.

4) Carbohidratos refinados

A menos que tengas un trabajo ligado a la actividad física, deberías reducir al máximo el consumo de alimentos ricos en carbohidratos refinados. Lo ideal, si quieres deshincharte, es que consumas una o dos porciones diarias. Podría ser una rebanada de pan y media taza de arroz, por ejemplo. Por supuesto, nada de bagels, cereales, patatas fritas o pasta.

"Tus músculos guardan un tipo de carbohidrato llamado glucógeno, que es el encargado de acopiar energía", asegura Alpert. Y cada gramo de este glucógeno se almacena con aproximadamente 3 gramos de agua, haciendo que te hinches. Si limitas la ingesta de carbohidratos, tu cuerpo tendrá acceso al combustible retenido en su músculo, podrá quemarlo y así drenar el exceso de líquidos almacenados. Y, por tanto, estarás visiblemente mucho más delgado.

Esta teoría es la que defiende el científico y periodista Gary Taubes, autor de 'Good Calories, Bad Calories'. En este libro, asegura que la clave para perder peso reside en "disminuir nuestros niveles de insulina", y que la mejor forma de hacerlo es eliminar de nuestra dieta todas las comidas que aumenten nuestra insulina, y que, por tanto, hace que almacenemos grasa. Son el azúcar y los carbohidratos provenientes de la harina y el almidón.

5) Alimentos que producen gas

Alimentos como brócoli, judías negras, coles de Bruselas, repollo, coliflor, lechuga, cebollas y leche contienen enzimas que naturalmente producen gas. Cuando las bacterias del intestino digieren estos alimentos, crean gas como subproducto, el cual se queda atrapado en el tracto gastrointestinal y puede acumularse en los intestinos y causar hinchazón. Por tanto, es importante cambiar estos alimentos por otros que no nos inflen, como los espárragos o la col rizada.

6) Alcohol

Si tu objetivo es un vientre plano para pasado mañana, es hora de aparcar el alcohol, pues es un irritante gastrointestinal y suele provocar hinchazón. Además, las bebidas carbonatas con las que se mezcla no hacen sino empeorar la situación, ya que las burbujas en las bebidas carbonatadas son moléculas de gas físicas que se asientan en el estómago.

Sobre todo, deberás evitar la cerveza." Cerca de un tercio de las calorías de una cerveza normal proceden de la malta, un hidrato de carbono refinado que engorda por si solo y, aún más cuando actúa junto al alcohol con el que va de la mano", asegura el divulgador científico y periodista británico Tony Edwards.

7) Chicles

Muchas personas que están a dieta mastican chicle para 'engañar' a su mente. Por desgracia, este truco no suele funcionar. En realidad, con el chicle hacemos que nuestro estómago crea que estamos comiendo y, en consecuencia, empiece a generar jugos gástricos para digerir esos alimentos inexistentes y se está forzando el exceso de aire en el estómago. Todo ese aire queda atrapado en el tracto gastrointestinal y provoca presión e hinchazón.

Tienes un evento importante en un par de días y estás hinchado. El modelito que te compraste de pronto no te cabe ni con vaselina. No sabes qué hacer. Te sobran unos 3 kilos que no sabes muy bien de dónde han salido. Piensas en ponerte a correr como loco por el parque que está al lado de tu casa, o en dejar de comer hasta el día del evento. Pero, amigo, no es una opción sensata, ni mucho menos.

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