Todo lo que deberías saber sobre las prostitutas, explicado por su mayor experta

Se dice que es el trabajo más antiguo del mundo, pero conocemos muy poco de los siglos de historia que arrastra, salvo que es probable que se desempeñase en todos los rincones del mundo en casi todas las eras del hombre, excepto en las más restrictivas. De las calles del Londres del siglo XIX a las concubinas de Japón, todas las culturas han recurrido a profesionales para suplir o complementar las necesidades amatorias de los hombres… O de las mujeres.

Por pudor o mera ignorancia, desconocemos gran parte de las vicisitudes de las prostitutas del pasado. Por eso resulta muy interesante la cuenta de Twitter Whores of Yore, que se define como un “catálogo de prostitutas, rameras, caminantes nocturnas, zorras, compañeras, mujeres de la noche y otras especies de la tribu de levantadoras de lino” y que está administrada por Kate Lister, una doctoranda que ha seleccionado una interesante cantidad de datos, información e imágenes relacionadas con la prostitución, que expone de forma amena.

Muchas de estas trabajadoras sexuales eran mujeres respetadas y poderosas que cambiaron las reglas del mundo en el que les tocó vivir

Es una buena muestra no sólo de la capacidad de difusión de la Historia que tienen las redes sociales, sino también de que, encontrando el tono adecuado, es posible ser divulgativo sin sacrificar el rigor. Como la responsable ha explicado a 'The Daily Dot', pensaba que sólo interesaría a otros historiadores, pero pronto empezaron a seguir la cuenta otras prostitutas reales que se sentían reflejadas en sus tuits.

A continuación recogemos 10 de los tuits más reveladores de “Zorras de antaño”.

La manifestación de 1668

Antes de que el movimiento obrero se articulase como tal, las prostitutas también se organizaron para luchar por sus derechos en la Inglaterra del siglo XVII, después de los disturbios de Bawdy House en Londres causados por la prohibición de las órdenes religiosas no oficiales y otras asociaciones… que, no obstante, no tocaron ni un pelo a los burdeles de la capital, que fueron arrasados como protesta. En la carta puede leerse una irónica petición de protección a lady Castlemaine, la amante del Rey Carlos II de Inglaterra.

Un proverbio antiprostitución

“Una noche en los brazos de Venus conduce a una vida con Mercurio”, señalaba un ripio del siglo XVIII que alertaba ante los peligros de la sífilis y el sexo recordando que, durante siglos y al menos hasta mediados del XX, el tratamiento de la enfermedad venérea se realizaba con mercurio. Es probable que la expresión provenga de la Inglaterra victoriana, siglos después de que, como algunos historiadores han afirmado, fuese portado a Europa por la expedición de Cristóbal Colón junto al chocolate y la patata.

La Madame más respetada

Julia Bulette figura con letras de oro en el Gran Libro de la Prostitución, después de dirigir uno de los burdeles más exitosos de Virginia City en plena Conquista del Oeste. Aunque Lister señala que era muy “querida” y que el día que murió la ciudad se declaró en luto, no aclara exactamente por qué: fue asesinada la noche del 19 de enero de 1867, estrangulada y robada, lo que causó gran consternación en la ciudad. Su asesino, un buscavidas francés, fue capturado un año después y ahorcado en presencia de un gran número de americanos ilustres entre los que se encontraba Mark Twain.

Certificado Oficial de Prostituta

Si no puedes controlar la prostitución, al menos regúlala. Es lo que debieron pensar las autoridades estadounidenses que empezaron a expender licencias para controlar esta tarea como la que aparece en la imagen, en la cual se permite a una mujer pública “ejercer su oficio” en la ciudad de Nashville (Tennessee). En el caso de que una trabajadora sexual fuese encontrada sin dicho documento, sería retenida durante al menos treinta días en la cárcel.

Fanny Murray, cortesana 'superstar'

Otra ilustre mujer dedicada a la prostitución, y otra relacionada, una vez más, con la vida pública londinense, Murray fue la amante del cuarto conde de Sándwich, John Montagu, y escaló hasta la fama desde unos orígenes humildes. Su vida dio lugar a 'La memoria de la celebrada señorita Fanny Murray', una de las biografías sobre prostitutas más célebres de la historia, y aunque está narrada en primera persona, es poco probable que fuese escrita con su propia pluma.

Porno del siglo XIX

'Los pecados de las ciudades de la llanura, o los recuerdos de un prostituto, con un breve ensayo sobre sodomía y tribadismo' (este era su título original completo), un libro anónimo que pudo haber sido escribo por James Campbell Reddie o Simeon Solomon, cuenta las historias de un joven chapero llamado Jack Saul, y algunos fragmentos hablan por sí mismos: “La agarré firmemente con mi mano, y poniéndome de rodillas imprimí besos calientes y lujuriosos en su ardiente cabeza cuando eché la piel hacia atrás. Me habría comido un bocado tan suculento, y anhelaba tragar cada gota del zumo perlado que sabía que mis caricias terminarían arrancando de su bonita polla”. Ríete tú de ' 50 sombras de Grey'.

El pasado desconocido de Maya Angelou

A muchos les sonará el nombre de Angelou por haber sido una de las grandes poetas de raza negra del siglo XX gracias a obras como 'Yo sé por qué canta el pájaro enjaulado' (Lumen). Sin embargo, muchas de sus biografías pasan por alto que trabajó como prostituta y madama en su juventud, a pesar de que ella misma escribió sobre su experiencia. Un claro ejemplo de que la prostitución sigue siendo un tabú, incluso cuando forma parte de una vida de éxito.

Proust y mujeres desnudas

Lister recuerda que, según algunos testimonios, el autor de 'En busca del tiempo perdido' había financiado un burdel sadomasoquista homosexual que solía frecuentar. Lo que sí se conserva, sin duda, es una carta remitida a su abuelo en la que le solicitaba dinero para, textualmente, que una mujer detuviese su “lamentable hábito masturbatorio”. “Si te ha conmovido mi situación y puedes atender a mis súplicas, espero que me puedas prestar la cantidad”, solicitaba en la carta.

La oda de Walt Whitman

“A una prostituta común” se llamaba este poema, en el que se podía leer, entre otras cosas, “mi niña, yo te cito / Y te pido que te prepares para ser digna de encontrarte conmigo, y te pido que seas paciente y perfecta hasta que yo venga. / Hasta entonces te saludo con una mirada expresiva para que no me olvides”. Es grande, contiene multitudes.

La prostituta pirata

La vida de Ching Shih da para una película… o, mejor aún, una trilogía, aunque Jorge Luis Borges ya se inspiró en ella para su relato 'La viuda Ching, pirata' y realizó un pequeño cameo en la tercera parte de la saga 'Piratas del Caribe'. Su tropa llegó a estar compuesta por 300 embarcaciones en las cuales zarparon entre 20.000 y 40.000 piratas, y se enfrentó a las armadas portuguesas, británicas y de la dinastía Qing, lo que la convirtió en una de las piratas más poderosas de la historia. Y, además, una de las pocas en retirarse tanto de la prostitución como de la piratería, lo que le permitió morir en paz a los 69 años.