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7 gráficos desvelan la probabilidad que tienes de divorciarte de tu pareja
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LA DURACIÓN DE TU MATRIMONIO DEPENDE DE ESTO

7 gráficos desvelan la probabilidad que tienes de divorciarte de tu pareja

Nadie sabe si nos divorciaremos de esa pareja que tanto queremos, mucho menos nosotros mismos, aunque hay predictores que se repiten en los matrimonios fracasados

Foto: Aunque cada matrimonio tiene su propia historia, existen diversas situaciones que aumentan la probabilidad del divorcio. (iStock)
Aunque cada matrimonio tiene su propia historia, existen diversas situaciones que aumentan la probabilidad del divorcio. (iStock)

Nadie sabe si nos divorciaremos de esa pareja que tanto queremos, mucho menos nosotros mismos. Sin embargo, las ciencias sociales han intentado durante las últimas décadas averiguar si existen predictores que puedan descubrir qué constantes comparten aquellos matrimonios que terminan mal. Es lo que ocurría con una investigación publicada en el Journal of Family and Economic Issues, que señalaba que el dinero era la principal razón por la que comenzaban la mayor parte de disputas en el hogar. Los psicólogos añaden que las mujeres suelen dar el primer paso en la separación e incluso hay abogados que han hecho una relación de las causas de divorcio más extrañas.

De entre todos esos trabajos, probablemente el más completo sea el que realizaron los profesores de la Universidad de Emory Andrew M. Francis y Hugo M. Mialon y en el que se centraban en una gran cantidad de factores, entre los que sobresalían los económicos. Los datos inspiraron al estadístico Randy Olson para seleccionar los siete que consideró más relevantes de la larga lista publicada por los profesores y visualizarlos en forma de gráficos, que aquí traducimos.

Las tendencias son llamativas. Como sintetiza Olga Khazan en un artículo publicado en The Atlantic, los matrimonios que más duran son, en definitiva, los que están bien planeados. Y, mientras que tener dinero siempre estimula la salud de la relación, aquellos que invierten grandes cantidades en los accesorios de la boda tienen más probabilidades de terminar mal. Una paradoja que lleva a los autores a señalar que no hay ninguna razón por la que defender la habitual visión de la industria de las bodas que sugiere que, cuanto más gastes en tu día especial, más tiempo vivirás feliz al lado de tu pareja.

¿Qué más importa? Aquí presentamos los gráficos, que toman un punto como referencia y establece el resto de probabilidades a partir de él. Se trata de gráficos relativos, por lo que la barra más alta siempre reflejará la situación en la que más probabilidades tenemos de divorciarnos y la más pequeña, en laque menos probabilidades existen.

Debido a que el matrimonio ha perdido gran parte de su carácter sagrado y el divorcio es cada vez más fácil, nos lo solemos pensar menos a la hora de pasar por el altar. Mala idea: es la mejor forma de durar poco con tu pareja.

Quizá el dinero no dé la felicidad (o quizá sí), pero los datos sí sugieren que alarga sensiblemente la duración de nuestros matrimonios.

Un factor peculiar: como cabe esperar, las personas que van regularmente a misa tienen menos probabilidades de divorciarse, pero, llamativamente, aquellos que van de vez en cuando tienen aún más posibilidades que los que no van nunca.

Esta sí que nos la esperábamos. Aquellos a quien no le importa ni una cosa ni la otra (¿recuerdan aquello de “en la salud y en la enfermedad”?) tenían más probabilidades de seguir con su pareja, mientras que los que se divorciaban con mayor frecuencia eran aquellos a los que le traía de cabeza la apariencia de su esposa o marido.

Toma ya. En una estrofa de su canción «The Honeymooners», Bruce Springsteen relataba cómo un familiar de la novia amenazaba con una navaja al protagonista en caso de que este la hiciese infeliz. Algo así sugiere la estadística, que señala que cuantas más personas presencien nuestra boda, más nos lo pensaremos a la hora de divorciarnos.

Una aparente contradicción respecto a lo anterior, ya que señala que no hay ninguna duda en que, cuanto más gastemos en nuestra boda, más probabilidades tendremos de que nuestra relación termine mal.

Claro que sí, hombre: puede marcar la diferencia hasta en un 41%.

Nadie sabe si nos divorciaremos de esa pareja que tanto queremos, mucho menos nosotros mismos. Sin embargo, las ciencias sociales han intentado durante las últimas décadas averiguar si existen predictores que puedan descubrir qué constantes comparten aquellos matrimonios que terminan mal. Es lo que ocurría con una investigación publicada en el Journal of Family and Economic Issues, que señalaba que el dinero era la principal razón por la que comenzaban la mayor parte de disputas en el hogar. Los psicólogos añaden que las mujeres suelen dar el primer paso en la separación e incluso hay abogados que han hecho una relación de las causas de divorcio más extrañas.

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