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Ocho cosas que no debes decir nunca a tus colegas en una reunión
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Ocho cosas que no debes decir nunca a tus colegas en una reunión

Las reuniones son necesarias para el buen funcionamiento de una empresa, pero somos muy amigos de alargarlas más de la cuenta sin motivo

Foto: La reuniones pueden llegar a ser un martirio si no se enfocan como es debido. (Serge Kozak/Corbis)
La reuniones pueden llegar a ser un martirio si no se enfocan como es debido. (Serge Kozak/Corbis)

Las reuniones son necesarias para el buen funcionamiento de empresas yasociaciones, pero en España somos muy amigos de convocarlas para cualquier cosa y alargarlas más de la cuenta sin que lleguemos a ninguna conclusión verdaderamente importante. Cuando nos sentamos en la mesa no sabemos si la reunión va a llegar a buen puerto: no hay nada que garantice el éxito de la misma. Pero, por desgracia, sí hay cosas que garantizan su fracaso.

El colaborador de las revista Inc. John Brandon ha desgranado las ocho frases más improductivas que todo el que ha trabajado en una oficina (o es propietario de una vivienda)ha oído en alguna ocasión. En su mayoría se trata de tópicos, normalmente bienintencionados, pero con un enorme poder para alargar las reuniones sin motivo y, lo que es peor, acabar con cualquier tipo de debate interesante.

1. “Deja que te démi opiniónsobre esto…”

Por lo general, nada más pronunciar estafrase –en la que muchas veces se intercambia la palabra “opinión” por la más atractiva y moderna feedback– el interlocutor se dispone a criticarla idea expuesta por el anterior orador. No cabe duda de que la retroalimentación bien entendida es positiva, pero detrás de una frase como esta no es habitual encontrar una crítica constructiva. Si no vas a ofrecer ninguna solución, y sólo vas a criticar sin tapujos la opinión de un compañero sin ofrecer nada a cambio, mejor cállate.

2. “Ya te lo dije por correo”

Esta coletilla es muy habitual en las discusiones laborales y no es más que una crítica porque sentimos que nuestros colegas no nos han hecho ni caso. A pesar de que sea criticable que tus compañeros no lean lo que les has dicho previamente, no tiene sentido enfrascarse en una discusión que sólo va a servir para caldear el ambiente. Si no leyeron lo que les trasladastepor correo, y quieres ser productivo, repíteles con brevedad lo que dijiste sin entrar a discutir quién leyó qué.

3. “Eso es un asunto secundario”

Se trata de una frase muy recurrente en las reuniones, pronunciada habitualmente por algún jefe que trata de silenciar a alguien de menor rango –nunca oirás esto en sentido contrario–. Está claro que hay que priorizar tareas, pero lo que es secundario para ti puede que no lo sea para el resto, máxime si en la reunión participan personas con diferentes funciones en la empresa. Además, que algo no sea prioritario no significa que no debamos tratarlo.

4. “Nadie está de acuerdo contigo en eso”

Tras esa frase se esconde la estrategia más sencilla, y menos argumentada, para tratar de descalificar a alguno de nuestros compañeros. Quizás sea cierto que nadie esté de acuerdo con la persona que acaba de hablar, pero esa no es razón suficiente para echar por tierra su opinión. Las reuniones deberían servir, precisamente, para escuchar la opinión de cada uno de los participantes. Muchas veces, las mejores ideas parecen extravagantes, y no encuentran la aceptación de la mayoría desde un primer momento.

5. “No hay malas ideas”

Esto suena muy bonito pero, si bien debemos escuchar todas las propuestas, no podemos ser tan necios para aceptar todas como validas. Claro que hay malas ideas, si no no tendría sentido convocar una reunión para trazar puntos de encuentro. Una mala idea es fácil de identificar, así que es mejor que no se alargue la discusión sobre ellas.

6. “Aquí mando yo”

Es muy fácil escuchar esta frase, u otras parecidas, del más alto cargo de la reunión, que trata de reconducir la conversación, descartar una propuesta o, sencillamente, llamar al orden. Y, ciertamente, son cosas que un jefe debe hacer, pero nunca usando una frase como esta. Si el moderador de la reunión parece obligado a resaltar su autoridad de esa manera es que la reunión se le ha ido de las manos.

7. “Busquemos a un experto de verdad”

Supuestamente las reuniones deberían ser un foro abierto de discusión y utilizar esta frase es como decirles a todos los participantes que no valen para nada. Cierto es que pueden surgir temas que necesitan de la ayuda de un experto, pero si crees que ninguno de los presentes en la reunión tiene la suficiente experiencia para opinar de cierto tema, busca ayuda externa tras finalizar el encuentro. No dejes a todos tus colegas en evidencia en mitad de la reunión. Te la devolverán.

8. “Hagamos una reunión de seguimiento”

Esto es algo que ocurre en multitud de reuniones: no se llega a ninguna conclusión clara y, sencillamente, se convoca otro encuentro con la excusa de realizar un seguimiento. Si quieres saber si lo acordado en una reunión se cumple,nombra a alguien encargado de hacer que se cumpla e informar de los progresos, no convoques otra reunión para seguir perdiendo el tiempo.

Las reuniones son necesarias para el buen funcionamiento de empresas yasociaciones, pero en España somos muy amigos de convocarlas para cualquier cosa y alargarlas más de la cuenta sin que lleguemos a ninguna conclusión verdaderamente importante. Cuando nos sentamos en la mesa no sabemos si la reunión va a llegar a buen puerto: no hay nada que garantice el éxito de la misma. Pero, por desgracia, sí hay cosas que garantizan su fracaso.

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