La dieta del aburrimiento: comer lo mismo todos los días adelgaza

Mantener una rutina alimentaria que nos obligue a desayunar, comer o cenar los mismos productos todos los días es la mejor forma para adelgazar. Si se practica este tipo de dieta solo durante el almuerzo, se llegarán a reducir unas 100 calorías de media diaria, según los resultados de un estudio publicado en el American Journal of Clinical Nutrition por un grupo de investigadores de las universidades de Buffalo y Vermont. Sin embargo, este régimen ha levantado fuertes polémicas debido a los posibles peligros que puede causar en nuestra salud el hecho de no disfrutar de una alimentación variada.

Reconocidas actrices de Hollywood como Jennifer Aniston, una de las protagonistas de la serie Friends, han hecho apología de la que comúnmente se denomina dieta del aburrimiento. Según Aniston, durante los diez años en los que estuvo trabajando en Friends, comió todo los días una ensalada en la que se repetían siempre los mismos alimentos.

La nutricionista Zoe Bingley-Pullin es una de las férreas defensoras de esta dieta. Según ella, no existen riesgos para la salud siempre y cuando la rutina alimentaria se implante solamente en una de las tres comidas diarias. En su caso, sigue la dieta del aburrimiento en el desayuno, pues es mucho menos traumático que seguirla durante la comida, explica. Así, desde hace varios años, nada más levantarse toma como siempre una rebanada de pan, un poco de aguacate, tomate y huevo frito. “Hoy en día nos volvemos locos para variar el consumo de alimentos y cocinar una receta diferente cada día; pero en realidad la comida es solo nuestro combustible y no deberíamos perder tanto tiempo pensando en ella”, sentencia Bingley-Pullin.

Posibles peligros para la salud

En su libro Eat, Taste, Nourish: Fabulous Food for Body and Soul, la nutricionista y chef norteamericana relativiza los beneficios para la salud de variar constantemente la dieta alimenticia. “Mi consejo es que reduzcamos el número de recetas y la variedad de alimentos que consumimos, siempre y cuando hagamos una elección correcta. De hecho, en la mayoría de dietas alimentarias saludables no existe una gran variedad de alimentos”, apunta.Las obsesiones patológicas por la comida han aumentado durante los últimos años

Los críticos con el “mono-luncher”, según el nombre original de la dieta en inglés, se apoyan en diversos estudios cuyas conclusiones establecen una relación de causa-efecto entre el régimen y los trastornos de alimentación. Lee Holmes, autora de Supercharged Food: Eat Your Way to Good Health, llama la atención sobre el incremento de la ortorexia –obsesión patológica por la comida sana que puede llevar a la desnutrición– entre la población durante los últimos años.

Un fenómeno, dice Holmes, que se potencia debido a las rutinas alimentarias demasiado estrictas, por lo que aconseja “saber escuchar a nuestro cuerpo y darle los diferentes alimentos que nos vaya pidiendo”. Incluso cuando tenemos un antojo, añade, “no debemos ignorarlo y tratar de privarnos de él sistemáticamente, pues puede que sea porque en ese momento tenemos necesidad de azúcares u otras sustancias”.